sábado, 10 de julio de 2021

Criada por una semana DIA 5 (Sábado)

 El sábado comenzó de una manera completamente diferente a los anteriores días, después de desayunar y lavarme, la señora Melissa entro en la cocina, con aspecto serio, y como de costumbre llego instantáneamente al punto, "Jenny, es hora de cocinar, vamos a estar muy ocupadas toda la mañana, tienes que seguir mis instrucciones y ser rápido, soy impaciente con las chicas lentas y descuidadas, !Así que ten cuidado!"

Me di cuenta entonces que por primera vez iba a trabajar al lado de la señora de la casa, hasta ahora seguía sus instrucciones y la mayor parte del tiempo me dejaba solo para seguir adelante con mi trabajo, apareciendo solo para alguna inspección ocasional, esta vez estaría allí junto a mí, exigiendo toda mi atención.

Ella se puso un delantal precioso, de color azul florido con volantes y correas que cruzaban la parte posterior y se ataba detrás en la espalda, vio como mis ojos la miraban con admiración y dijo riendo, 2Ahora Annie este no es un delantal de doncella, es para la señora de la casa, pero no te preocupes, mañana tendrás que lavarlo y plancharlo, estoy segura que te lo probaras en secreto", dijo eso y me guiño un ojo, dios, esa mujer era tan perceptiva, que podía leer mi mente más rápido que yo mismo.

Era muy eficiente y trabajaba rápido, de vez en cuando miraba un libro de recetas, pero ella tenía totalmente el control, yo estaba a su lado, cortando las verduras, lavando cacerolas y sartenes para el siguiente uso, preparando pequeñas cosas, etc.

Alrededor de las una se detuvo y dijo con voz satisfecha, "Bueno, creo que ya hemos terminado", entonces se acordó de algo y dijo ansiosamente, "Oh, querida, hemos olvidado por completo a Paul, Annie, por favor, ¿Puedes hacerles unos bocadillos de queso para todos y un poco de café, pobre, se debe estar muriendo de hambre? Antes de llevar la comida, quítate ese delantal sucio y ponte uno nuevo".

Mire el delantal, y sin duda estaba sucio, con manchas de comida, salpicaduras de agua, etc. También el delantal de la señora Melissa, debía recordad que tenía que poner algún quita manchas antes de ponerlos en la lavadora mañana.

A eso de las 5 de la tarde todo estaba listo para la satisfacción de mi señora, la cocina estaba impecable y la comida preparada, arregle la casa y quite el polvo de todas partes, lo único que tenía que hacer era poner la mesa para seis, la Sra. Melissa dijo que podía haces eso después de ducharme y cambiarme por mi uniforme formal, así que a eso de las seis me presente para la inspección, me sentía nervioso y emocionado, por primera vez en mi vida iba actuar como una sirvienta para huéspedes externos.

La señora Melissa me hizo retirar mi delantal y ella ajusto otro, cuando estaba poniendo la mesa, ella me dio una conferencia una vez más, "Espero que nuestros invitados empiecen a llegar después de las siete, los dejas entrar con una sonrisa educada y una leve reverencia, una pregunta y, por supuesto, te dirigirás a ellos como señor o señora las dos señoritas que una ya conociste, Debbie, y la señorita Charlotte puedes dirigirte a ellas simplemente como señoritas, algunos minutos después de que todos hayan llegado, comenzaras a servir el champan y los aperitivos.

Ella se detuvo brevemente para hablar con el perro, realmente amaba a ese animal y se volvió a mí, "No espero que estemos sentados para la cena hasta las ocho, así que después de servir las bebidas, volverás a la cocina y organizaras la comida como te he explicado antes, te vigilare en todo momento, por lo tanto, relájate y trata de concentrarte en tu trabajo, identifícate con el papel de una criada, que creo que hasta el momento todo va bien, ahora vuelve a la cocina y espera allí, tengo que irme a prepárame.

Estaba comprobando y revisando varias cosas de la cocina, como la temperatura correcta del horno, el aderezo de la ensalada, las copas de champan cuando escuche la campana de la puerta y el ladrido del Bruno.

La voz de la señora Melissa salió de la sala de estar, "Annie, ya están aquí, corre como una buena sirvienta y déjalos pasar"

"En seguida, señora", conteste, mientras corría hacia la puerta, sintiéndome nervioso y excitado.

Abrí la puerta con vacilación y vi la cara familiar de la señorita Debbie sonriéndome, se veía estupenda, llevaba un precioso vestido que se le adaptaba a la perfección, detrás de ella su compañera un poco mas mayor pero igualmente muy guapa y elegante llevaba un pantalón y el conjunto superior se le veía muy bien, también sonreía.

"Hola Annie, te veo muy bien con tu uniforme", dijo la Srta. Debbie en forma casual.

Me acorde hacer una breve reverencia y contesté cortésmente y con la voz más suave que puede hacer, "Gracias, señorita, es usted muy amable de tu parte"

Ella siguió hablando conmigo, mientras yo me alejaba para dejarlos entrar, "Esta es mi compañera, la señorita Charlotte y ella ya sabe todo de ti, así que no seas tímido"

Me volví y dije cortésmente, "Hola señorita, por favor entrad"

La señorita Charlotte me miro divertidamente pero sin rastro de burla y volviéndose hacia la señorita Debbie dijo con un acento británico muy pronunciado, "Bueno, querida, se ve mejor de lo que me pensaba, un poco más grande de lo normal, pero puedo pensar en muchas mujeres que habrían estado celosas de tener sus piernas"

Se volvió hacia mí, "Annie tienes una bonitas piernas, ¿Lo sabías?", ella continuo mirándome.

Me ruborice profundamente y dije de manera avergonzada, "Gracias señorita, es usted muy amable"

"En absoluto cariño, siempre digo la verdad", contesto ella con su acento muy distintivo de clase alta, mientras ambas se marchaban hacia la casa

Seguí detrás y me apresure a entrar en la cocina para preparar las bebidas mientras la señora Melissa las saludaba con besos y abrazos.

Estaba a punto de llevar la bandeja con los vasos de champan cuando el timbre volvió a sonar.

Al instante la voz de la señora Melissa "Annie, ve a la puerta abrir, por favor"

Esta vez era un poco más difícil para mí,  una pareja de más edad se esperaba y me sentí un poco mas ansioso, pero las cosas estaba sucediendo tan rápido y me estaba poniendo más ocupado por minuto, así que no tuve tiempo para preocupaciones o vergüenza.

Abrí la puerta y una señora de unos 40 años me sonrió superficialmente, detrás de ella un hombre de unos 50 años estaba de pie mirándome con evidente curiosidad, "Hola somos, el Sr. y la Sra. Parker" dijo la señora bastante arrogantemente debería decirlo.

Dije, al mismo tiempo, "Por favor, entren", me aparte para dejarlos entrar, sin decir palabra, avanzaron, ignorándome completamente, una reacción totalmente diferente de las dos señoritas anteriores.

Pronto, les lleve primero una bandeja con las copas de champan e inmediatamente después la otra bandeja con canapés, todos estaban envueltos en una profunda conversación alegremente, después de todo se acercaba la navidad y había una festividad en el aire, rápidamente me di cuenta de que nadie me prestaba la mínima atención, yo era la criada y sin duda me trababan como tal, entonces tuve una peculiar sensación de ser una pieza más del mobiliario, ya no tenía que preocuparme por esas personas, se me giraba trabajo esa noche y tenía que hacerlo a la perfección!

La señora Melissa debió haber visto mis sentimientos mas íntimos, probablemente era obvio en mi cara, porque ella me miro y me guiño un ojo, como si supiera que decirme

En el momento en que se sentaron para cenar estuve muy ocupado tenía que concentrarme para no hacer algo mal, recordé que debía servirles desde la izquierda y retirar los platos usados desde la derecha, un par de veces la señora Melissa vino a la cocina para tranquilizarme diciendo que todo marchaba bien y la gente estaba muy contenta de mi actuación, según me instruyeron cuando no estaba ocupado estaba parado a una distancia con mis manos cruzadas delante del delantal, intentando anticiparme a sus necesidades, yo estaba a una distancia segura, sin embargo, para no poder escuchar lo que hablaban.

A eso de las diez estaban sentados cómodamente en el salón, disfrutando del café, cuando entonces recibí una señal de la señora Melissa de que podía retirarme y poner los platos a limpiar que ella se podría al frente de los huéspedes de ahora en adelante, me di cuenta de que era la señal de despido para mi, ya no era necesario en las aéreas principales de la casa, recogí la mesa completamente y fui a la cocina.

Mi corazón se hundió cuando vi la pila de platos sucios, ollas, sartenes y todas las otras cosas que debía hacer, me quite el delantal y me puse uno de trabajo grande, me puse unos guantes de goma y comencé a llenar el fregadero con agua caliente con jabón.

Estaba perdido en mis pensamientos cuando oí un ligero ruido detrás de mí, me volví asustado y vi a las dos señoritas Debbie y Charlotte mirándome.

"Por favor, no pares, admiramos tu compromiso con tu tarea", dijo la señorita Debiee suavemente

"Realmente disfrutas haciendo este trabajo, ¿no?" Me pregunto la señorita Charlotte

Respondí sin detenerme, "Si, señorita, lo hago, no estoy seguro del porque, pero el servicio y los deberes domésticos me vienen naturalmente, así que me siento bien, haciéndolo, mi esposa me dice que debía haber sido una criada en mi vida anterior y tiendo a creérmelo."

"Tu haces todo tan natural", continuo la señorita Charlotte, "Sin alboroto, sin quejas, sin mal humor, ojala tuviéramos una criada como tu, que lastima que no vivas permanentemente en Melbourne, serias muy popular entre nuestros amigos y también estarías muy bien pagado"

Se detuvo para mirar a la señorita Debbie, que asintió con la cabeza y continuo, "Y melissa nos dice que te gustan los uniformes y delantales, así que nos aseguraríamos que proporcionártelos.

Yo estaba escuchándolas y mi entusiasmo aumentaba, !Que increíble escena!, allí estaba lavando los platos debidamente uniformado y con dos damas que me estaban ofreciendo trabajo en serio, sin ningún pensamiento raro ni rastro de burla.

"Les agradezco su amabilidad y generosidad, agrego que probablemente en un futuro no muy lejano nos decidiremos con mi esposa a trasladarnos permanentemente a Australia ya que con mi edad el único trabajo que podría encontrar habría sido el de criada no cualificado y luego ciertamente me acordaría de ustedes."

Les gusto esa idea porque ambas dijeron al unisonó, "Annie, eso seria maravilloso, entre Melissa y nosotras y por supuesto tu propia casa tendrías un trabajo a tiempo completo, probablemente Melissa pueda convencer a tu Jefa, después de todo son viejas amigas, y por la forma en que estamos ansiosas de conocerla la próxima vez que vengas con ella es tan afortunada tener runa joya domestica en casa"

Me di cuenta de que llamaban a Pat como jefa, no mi esposa, obviamente no podían concebir que yo pudiera ser otra cosa aparte de lo que parecía ser para ellas, solo una criada.

Pero también notaron que realmente parecía que me gustaba, les di las gracias una vez más, mientras la señora Melissa anunciaba que otra pareja estaba a punto de irse y quería decirme buenas noches.

Esa noche en mi cama soñé en mudarme a Australia y convertirme en una criada permanente, fue emocionante y desconcertante al mismo tiempo.

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