A
la mañana siguiente, a las ocho de la mañana yo estaba en el autobús, de camino
a la casa que debía trabajar como criada por una semana entera, era un precioso
martes por la mañana, faltaban diez días para la Navidad y el verano estaba en
su pico más alto en esa parte del mundo, mi esposa había salido muy temprano
hacia el aeropuerto y yo estaba sentado en el asiento llevando una pequeña
bolsa de lona con todos mis objetos personales, debo reconocer que puse en la
bolsa mi vestido de criada negro y el delantal blanco, con la esperanza de que
Melissa me daría la oportunidad de utilizarlos, no tenía ni idea de lo que ella
entra para mi, excepto por el hecho de que probablemente tendría que trabajar
muy duramente, pero el trabajo de casa nunca me había preocupado, por lo
contrario, era muy comprometido a trabajar en casa, una vez que mi delantal
estaba atado firmemente a mi cintura.
El
autobús se movía a lo largo de las avenidas arboladas de Melbourne pensaba que
iba a la casa, no como un invitado o incluso como un visitante, sino como un
mero servidor, era una casa vieja victoriana en medio de una gran parcela de
tierra, en un extremo del jardín se encontraba el estudio de Paul, a pesar de
que estaba a las afueras, las casas cercanas estaba a una distancia y la valla
que les rodeaba era bastante alta cortando los puntos de vista de los intrusos
o transeúntes, un lugar ideal para vivir como Sissy Maid.
Diez
minutos antes de las nueve estaba de pie delante de la puerta, pero espere
hasta las nueve en punto antes de llamar al timbre, inmediatamente oí los
ladridos del enorme Rottwiler que tienen, lo llaman Bruno, mientras corría
hacia la puerta, estaba un poco asustado de ese perro, pero desde luego el me
conocía.
Y
entonces oí la voz melódica de Melissa, "Ven Bruno, no asustes a nuestra
nueva criada, es MG, ya lo recuerdas, él va a hacer un montón de cosas en la
casa"
Ella
me dijo entrar y después de un abrazo inicial, ya que no me había visto durante
todo un año, dijo sin rodeos, "Sígueme, no eres ningún huésped ahora o un
visitante, a partir de ahora entraras por la puerta de servicio, esto va ser tu
camino durante tu estancia aquí", el estomago parpadeo de nuevo, Melissa
estaba empezando a ser firme
Desde
la puerta de servicio cruzamos un pequeño pasillo con dos puertas, la puerta de
la izquierda conducía a la lavandería y la de la derecha a una pequeña
habitación de invitados, llegamos a una gran cocina, que ya conocía de antes,
en el centro de la habitación había un mesa con cuatro sillas, Melissa se sentó
en una de ellas y me dijo, "Pon la tetera, que me vas hacer un poco de
café y té explicare todo esto", empecé hacer el café, lo que podía
recordar donde estaba todo, inmediatamente me di cuenta de una enorme pila de platos
sucios, ollas y sartenes que estaban en el fregadero y alrededor de él, eso
seguramente es donde deberé empezar, pensé.
Tan
pronto como le serví el café, Melissa me indico que me sentara enfrente de ella
y empezó a hablar, "Voy a ir directamente al grano, vas a pasar una semana
en esta casa como criada, cualquiera que sea lo que conlleva, tienes que actuar
como una criada adecuada, debidamente uniformada, por supuesto, yo se que
tienes experiencia en las tareas del hogar, pero no va a ser lo mismo que
cuando trabajas en tu casa bajo la supervisión indulgente de mi amiga
Palmadita"
Ella
se tomo un minuto para tomarse el café y mientras se preparaba para continuar,
un repentino pensamiento le paso por la cabeza, porque al instante dijo,
"Antes de continuar, quiero que vayas a tu habitación que esta frente a la
lavandera, la cual será tu habitación mientras estés aquí, y en un armario
pequeño vas a encontrar un uniforme azul con rayas, un delantal, póntelos y
vuelve aquí, asegúrate de que llevas sujetador y una faja con ligas, confió que
has traídos algunos contigo, también encontraras unas medias negras y unos
zapatos de tacón bajos, vuelve aquí adecuadamente vestido por favor y luego me
sentiré con mas humor para poder tratar con mi nueva doncella" y con un movimiento
majestuoso de su mano me despidió.
Volví
a los diez minutos más tarde, sintiéndome bastante tonto, porque sin peluca y
maquillaje, me sentía medio vestido, tenía que admitir sin embargo que todo el
equipo estaba a la perfección, ella probablemente Pat le había dado mis
medidas, el vestido estaba abrochado hasta arriba por la parte delantera y
tenía dos bolsillos grandes, una trenza blanca decoraba el cuello, las mangas
cortas y los bolsillos, eran un símbolo estándar para un vestido de criada,
pero la prenda inusual era del delantal, grande y práctico, pero también
bastante redondeado y de doble cara, si se puede utiliza esta expresión, a un
lado era del mismo material del uniforme, pero por el otro lado de color blanco
de vinilo, unos grandes volantes afilaban la falda del delantal y las correas
de los hombros, hacia juego con el uniforme, pero no estaba seguro de que si
era parte de él.
Melissa
me miro con cara más bien divertida, pero esta vez no me pidió que me sentara,
ella simplemente continuo hablando, "Te veo muy bien con tu uniforme,
Annie!" vio la mirada de interrogación en la cara, porque ella añadió de
inmediato, "Creo que este nombre será mejor durante tu estancia en esta
casa, creo que el nombre que tienes con tu esposa es demasiado pretencioso para
una criada y además el nombre de Annie me trae buenos recuerdos, ese era el
nombre una criada filipina que mis padres tenían cuando yo era niña"
Me
quede bastante quieto por la actitud de Melissa, era un cambio de la mujer que
conocía socialmente como amiga de la familia, ahora ella había decidido ponerme
el nombre de una criada que había tenido en su juventud, sentía un placer
siniestro sin embargo, el hecho de que me diera otro nombre me recordaba las
historias que había leído sobre criada victorianas y eduardianas.
Ella
continuo con su pequeña voz, "Probablemente te preguntaras por qué no he
pensando en ponerte una peluca, la respuesta es simple y es para tu propio
beneficio, estamos en medio del verano, hace calor y vas hacer un montón de
trabajos pesados, vas a sudar, ensuciarte, imagínate los incomodo y ridículo
que se te vera con el maquillaje y la peluca, después de todo, ¿Por qué ocultar
el hecho de que eres un chico, por supuesto, si llegan visitantes o cuando
salimos, yo te hare ver más convincente"
Cuando
oí la posibilidad de eso, por primera vez abrí la boca, "Pero Melissa,
¿Crees que es prudente que salga vestido así en público?, ¿Qué pasa
si...?"
Ella
me interrumpió con la mano y con una ligera molestia dijo en su voz
"Para
empezar no soy Melissa para usted, se referirá a mí como su señora en todo
momento, en cuanto a lo de salir con su posición actual, esto lo decidiere yo,
y pensare que probabilidades están en su contra, sin embargo, creo que es hora
de empezar a trabajar, hoy será el día de su adaptación en su nueva situación y
voy a mantenerlo ocupado con las tareas domesticas en general, empezara por la
cocina, quiero que quede inmaculada en todo momento, entonces, acto seguido
iras a nuestro dormitorio, cambiaras las sabanas, y quitaras el polvo a fondo.
Por
entonces será la hora del almuerzo, tendrás un descanso y te diré lo que tienes
que hacer después, estoy segura de que recordase donde esta todo, pero voy a
estar por el alrededor y si necesitas alguna cosa me lo puedes pedir.
Finalmente
dejo de hablar y me miro, yo estaba de pie en lugar incomodo en medio de la
habitación, jugando con el borde del delantal, recordó algo, porque ella dijo
con una sonrisa, "Si tienes alguna pregunta sobre tu delantal, puedes usar
dos cosas, es para cuando se lava los platos o cualquier otro trabajo
desordenado y ostentoso puedes utilizar el lado del vinilo, en cualquier otro
ocasión lo usaras como parte de tu uniforme, como un juego, y ya que estamos
hablando de delantales, siempre quiero que uses uno, cuando estés de servicio,
también encontraras algunos pañuelos en tu habitación, ponte uno para proteger
el pelo, en una etapa posterior podríamos comprarte una cofia como una buena
criada, ahora venga que ya es hora de que te pongas a trabajar"
Tenía
una sensación de estar muy agobiado, pero también emocionado desde de ese
discurso imperioso, corrí a mi habitación para ponerme el pañuelo en la cabeza
y volver a la cocina, mi primer día de varadero servicio estaba a punto de
empezar.
una
hora más tarde estaba terminando en la cocina, limpiando a fondo las
superficies, cuando Melissa vino a inspeccionar, me di la vuelta ligeramente
sobresaltado y de manera totalmente espontanea, me cogió tan de sorpresa que
incluso le di una tímida reverencia.
Ella
me miro medio divertida, medio sorprendida y dijo, "Creo que eres más
marica de lo que pensaba al principio, eso me va bien, me da la oportunidad de
explorar tu lado sumiso femenino a un punto de que tu esposa nunca lo ha hecho,
tienes suerte de una manera, si la patente era una persona diferente habrías
sido una criada permanente por ahora y no es fácil ir a tiempo parcial que se
te permite ser, pero, por supuesto, esto no lo tengo que decidir yo, es tu vida
y el delicado equilibrio entre los dos"
Ella
lo dijo con arrogancia y determinación que nunca lo había visto antes en ella
cuando veníamos como amigos, ella, obviamente, es una de esas, raras,
finalmente, que cuando tienen la posibilidad toman la ventaja y dominan.
Ella
interrumpió mis pensamientos diciendo, "Tan pronto cuando termines la
cocina, haz un café y quiero que lo lleves a mi marido Paul en su estudio,
quiero que lo lleves adecuadamente en una pequeña bandeja, y no te olvides de
tu ropa de trabajo con el delantal, piensa que estas sirviendo al dueño de la
casa
Se
dio cuenta de que quería preguntar algo, porque me dijo sin rodeos
"¿Quieres
decir alguna cosa Jenny?"
"Discúlpeme
señora, ¿Y cómo voy a dirigirme a su marido?" y antes de que tuviera la
oportunidad de contestar, añadí en voz baja, "señora, debo decir que me
siento un poco cohibida para aparecer delante de Paul, con lo miro, después de
todos los años que nos conocemos…"
Ella
me interrumpió algo molesta, "Mira, Jenny, en este momento tu eres mi
criada en esta casa y nadie va a prestarte atención de quien y que eras antes,
especialmente Paul que está totalmente perdido en su mundo, al verlo, te
dirigirás a él como el señor Paul y actuaras educadamente como lo haría
cualquier empleado domestico.
Ella
me dejo abrutadamente, así que me arrodille y empecé a fregar el piso de la
cocina, que ciertamente tenía mucha suciedad acumulada, podía ver que de verdad
necesitaba una criada para llevar esta casa.
Más
tarde tuve que llevar el café al Paul, toque que puerta del estudio llevando la
bandeja con el café, mi corazón palpitaba sin saber a que me iba a enfrentar,
probablemente él podría reírse de mi, llamándome de todo, o dios que sabe más,
imaginaos que sorpresa cuando lo oí decir, "Entra Betty, pon el café
encima de esa mesa, mmmm, que bien huele"
No
me dio ni las gracias, ni siquiera se volvió para mirarme, en ese momento me di
cuenta de lo que suelen sentir los sirvientes, son como objetos de la casa a la
que pertenecen.
Cuando
le menciona a la señora Melissa, (¿No es gracioso, estaba empezando a pensar en
ellos ya como la señora Melissa y el Señor Paul?), que me había llamado Betty,
ella se rio y me dijo que este era el nombre de su anterior criada y que podía
ver por mi mismo como a Paul no le importaba la persona que le servía el café, que
era una simple sirvienta de la casa.
El
resto del día transcurrió de manera agitado y me las arregle para poder irme a
la cama un poco después de las diez, muerto de cansancio, me puse un camisón
largo de algodón que había encontrado en el armario de la habitación,
obviamente con un marginado vestuario de la señora Melissa, mantuve el sujetado
y las bragas eso me hacía sentir más femenino, mientras me dormía, las escenas
del día al servicio real volvían a mi memoria, todavía no podía creer que esto
realmente me estaba sucediendo, justo cuando me estaba quedado dormido el
nombre de Annie me volvió, si la Señora Melissa tenía razón, Annie sonaba mejor
que Mónica
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