Depila
totalmente al sissy, como está usando medias regularmente, ha llegado el
momento de tirar cualquier ropa interior y pijamas masculinos que tenga.
Esto
significa que cuando se acueste por la noche, se dormirá con un camisón de satén
sedoso y satinado con encajes, o una blusa, con las medias.
La
suave fricción proporcionada por su atuendo de noche satinado y su fina calcetería
femenina lo mantendrá despierto y excitado durante un tiempo, antes de que
finalmente se quede dormido inmerso en sensaciones, pensamientos y emociones
femeninas.
Soñara
con bonitos sueños de sissys vestidos con ropa de mujer.
Cada
vez que se despierte durante la noche, inmediatamente se dará cuenta de las
sensuales prendas femeninas en las que está envuelto.
Tan
pronto como haya realizado sus abluciones, abría un sorteo de ropa interior,
para encontrar solo las bonitas bragas y sujetadores, ligueros y otras prendas
de uso femenino.
Sabe
que tendrá que ir al trabajo usando la ropa interior femenina, todo el día, y
lo que es aun más excitante, cada día.
Este
es el mejor momento para tirar todos los calcetines de él, por su puesto cuando
habrá el cajón solo encontrara medias y pantys.
Con
la consecuencia de que deberá ir a trabajar todos los días además de usando
medias, con ropa interior femenina en su trabajo.
Por
supuesto, que en algunos entornos profesionales, los tobillos que exponen
medias y las líneas obvias de los sujetadores pueden ser profesionalmente
inhibidores, por lo que se puede ejercer discreción cuando se usa un sostén en
el trabajo, una bonita camisola de satén y encaje puede ser una alternativa.
En
cuanto a las medias, por encima de las pantorrillas y de color oscuras
pasarían, sin embargo en mejor que sean lo más femeninas posibles, pasara todo
el día trabajando tratando de exudar la imagen de un hombre profesional
confiado, mientras que debajo se está ahogando en afeminamiento.
Lo
hace constantemente consciente del hecho de que su exterior masculino es una
farsa, con el tiempo, le resultara cada vez mas difícil mantener su fachada
masculina convincentemente, se volverá cada vez mas tímido, pasivo y afeminado.
Fuera
del trabajo, tal vez podéis tomar mayores riesgos, como haciéndolo usar un
sujetador blanco o una camisola, sembrando obviamente que se vea a través de
una fina camisa de lino, o tal vez dejando un par de botones desabrochados,
para exponer el toque del encaje.
Las
medias debajo de los pantalones cortos también serán muy obvias o unos
pantalones vaqueros ajustados sobre ellas, incluso algunas medias blancas de
encaje, con los pantalones ajustados mantendrán su cara ardiendo de vergüenza.
Estos
pasos generalmente debe graduarse, aumenta el riesgo, la exposición y la humillación
paso a paso, sin embargo, cuando más expuestas estén las medias y la lencería,
mas autoconciencia sentirá, más comprometido y avergonzado.
Con
el tiempo la creencia de que le queda algo de masculinidad en él se erosionara
a medida que sus delirios de hombría (o al menos su confianza en que pueda
logar una farsa masculina) se erosionaran, un afeminamiento creciente
reemplazara para llenar el vacío con cada nueva fase de su emasculación.
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