Tres vestidos de Charlie Parte 2

A la mañana siguiente, cuando Charlie se levanto y se fue hacia la ducha, se dio cuenta de que Georgia había cogido la mayor parte de los cajones del cuarto de baño. Había cinco cajones y todos ellos los había cogido para sí misma. Mientras que él estaba buscando un cajón libre, Georgia le escucho. Ella irrumpió en el cuarto de baño y con su pelo rojo lleno de rulos, le dijo, “no toques mis cosas”.

Él le explico que solo estaba tratando de encontrar algún cajón libre, ella de mala gana limpio uno y salió de la habitación con una rabieta.

Charlie cogió el traje gris que su tía le había dado. Era demasiado lindo para su gusto. Los pantalones eran demasiado cortos y exponían la mayoría de sus pantorrillas, la parte superior era muy ajustada y le daba un aspecto delgado y tenía un poco mas de empate de tamaño. Él no pudo evitar pensar que solo era ropa de chica hecho para hacer que ver que fuese un muchacho. No ayudaba nada su cabello que era un poco largo, así que trato de hacer muecas más masculinas. El no tenia zapatos a juego, pero sus zapatillas de cuero negro no se veían nada fuera de lugar.

Se sentía cohibido bajando por las escaleras para desayunar hasta que vio a las chicas lo que llevaban. Estaban cada una de ellas con un traje de sirvienta de color oro amarillo con un delantal con volantes blancos y calcetines hasta la rodilla de color blanco. Se veían como algo sacado de Alicia en el país de las maravillas. La Sra. Hughes llevaba un vestido más formal en color oscuro. Ella lo agarro y lo llevo aparte.

“buenos días Charlie!, el desayuno es en el comedor, se parece un poco a un restaurante porque…. Bueno es que lo es. Aquí también servimos la cena ya que todo entra en el hospedaje. Desayuno es menos formal. Por lo general, lo proponemos que sea fuera y dejamos que los clientes lo elijan lo que quieren. Por cierto, me gustaría que me llamaras la señora Hughes delante de las chicas. Hago que todas me llamen así, y no quiero mostrar favoritismos”

“no hay ningún problema, señora Hughes”

“genial, Charlie. Te veo muy guapo con ese traje, por cierto. Mira, ya tengo preparado lo que me tienes que hacer”

En el desayuno, se dio cuenta que las chicas le había empezado a llamarlo Charlie. Era extraño, ya que nadie lo había llamado antes por su nombre. Después todas se pusieron a sus deberes. Charlie oyó un alboroto extraño cuando Kate y Georgia transformaros un uniformes en diferente color a blanco y negro, para ir hacer las habitaciones. Lilly se quedo con su uniforme amarillo para hacer el trabajo de la cocina.

La Sra. Hughes lo envió a fuera a cortar el césped. Lo que no sonaba muy mal, excepto que en realidad eran tres céspedes, y que no permitían que las cortadoras fuesen con combustible en el distrito histórico, así que tuvo que utilizar un cortacésped manual. Afortunadamente los jardines eran planos, por lo que no tenía que empujar la maldita maquina por alguna colina. Ella también le dio un cambio de ropa, mas ligera parecía un pijama, pero al menos le ayudo a mantener la calma mientras trabajaba.

Era agotador, y pronto le dolió todo y se cubrió de sudor por todo el cuerpo. Cuando hubo acabado se fue a la habitación, se quito la ropa, menos su ropa interior, y cayo fulminantemente encima de la cama. Extendió sus piernas para dejar que el calor abandonara su cuerpo. En la casa había discretamente un poco de aire acondicionado y eso hizo que se sintiera un poco mejor.

Al poco rato, Georgia apareció por la puerta.

“es la hora de la comida”, cuando lo vio tendido y casi desnudo, sus ojos se abrieron y ella hizo una pausa por un segundo. Charlie estaba demasiado cansado para responder, “… y ponte algo de ropa, aggg, chicos apestosos.” Ella dio media vuelta y salió, cerrando la puerta detrás de ella.

Después de comer y hacer un poco el turista, se acerco a la cocina donde Lilly estaba en el trabajo limpiando las cacerolas de la comida.

“hey Charlie, no has visto a Kate, por ahí? Se suponía que hoy me tenía que ayudar a cocinar”

“no”

“simplemente genial. Supongo que puedo manejar todo esto yo misma. Pero si tenemos muchos clientes, esto no va ser una noche divertida”. Ella suspiro.

“tu sabes, yo puedo cocinar…”

“¿en serio?, te estás ofreciendo?”

“Claro que puedo, siguiendo recetas… mi madre solía trabajar hasta tarde y ella me pagaba para que le ayudara. Así que hice una clase de cocina un verano”

“esto va a ser divertido, ¿Por qué no lees algunas recetas y empiezas a preparar la comida. Voy a preparar el comedor”. Ella corrió hacia un perchero, cogió un delantal y lo ato alrededor de Charlie, “confía en mí, no queras mancharte esta ropa. Es muy cara”, el delantal era bastante grande y con volantes con el cinturón amarillo. Charlie se lo puso y se puso manos a la obra.

Ninguna de las recetas eran demasiado difíciles de seguir, y estaba haciendo grandes progresos en la comida que estaba preparando y abrió la nevera, pero se dio cuenta que no había pan y pollo. Las cosas iban bien. Lilly estaba dentro y fuera de la cocina, mientras él cocinaba. Cuarenta y cinco minutos más tarde, Georgia y la señora Hughes entraron por la puerta lateral.

“hey Lilly, ¿Estás sola?”

Ambos se detuvieron y se quedaron heladas cuando vieron a Charlie trabajar en la cocina.

La Sra. Hughes sonrió educadamente y dijo, “oh, no importa. Veo que lo tienes cubierto. Gracias Charlie!”

“ningún problema Sra. Hughes”

“supongo que no”

“ves Georgia, los chicos también pueden ser útiles”

Georgia no se parecía a la sarcástica habitual. Ella estaba en silencio mirando a Charlie. Sus ojos se agrandaron, y ella lo miro fijamente. Cuando ella hablo, su voz era tímida, y su cara enrojecida.

“supongo que tienes que cubrir.”

“Gracias, ¿Estas bien? Te veo sorprendido” dijo Charlie.

Georgia inclino lentamente la cabeza hacia un lado mientras miraba a los ojos, “no, solo estoy impresionada”. Ella se volvió bruscamente y salido de la habitación.

La Sra. Hughes espero a Lilly para volver con los clientes, entonces ella se llevo la mano a la oreja y le comenta a Charlie, “no te lo tomes a mal. Pero cuando entre, pensé que eras tu madre con ese delantal. Cuando éramos niñas”

Charlie no lo había pensado, y como tampoco no había ningún espejo en la cocina no se había fijado. Pero cuando la señora Hughes se fue, aprovecho la oportunidad para ir al baño, y mirarse. El delantal se había hecho para repasar el vestido de la cocina amarillos que las chicas llevaban, pero también encajaba muy alrededor de su traje gris, y parecía que era un vestido. Dio un paso atrás, y vio que era muy fácil pasar como una chica. No como una barbi, pero sí que se parecía a las fotos que tenia de su madre cuando tenía su edad.

Después de que el ayudara en el servicio de cena, se quito el delantal, y Lilly le dijo que fuera a buscar a Georgia para que ayudara con los platos. No estaba seguro de lo que diría ella, cuando él llamo su puerta, ella lo saludo con la misma mirada extrañada que tenía en la cocina. Lo miro de arriba abajo, aunque esta vez se le veía la cara de decepción.

“está bien, ahora bajo”. Dijo ella con molesta y se fue para abajo.

Charlie ayudo en la cocina dos veces mas durante la semana. Las dos veces durante los turnos de Lilly. Y las dos veces, Georgia volvió un poco mas temprano de lo habitual para ayudarlos. Charlaba informalmente con Lilly, pero con Charlie no le decía nada. Ella incluso no hacia ni contacto visual.

Unos días más tarde, Charlie regreso de la ciudad y encontró a Georgia trabajando frenéticamente en la cocina. Cuando vio que se le acercaba Sheila con un gran alboroto corriendo del comedor con un bandeja de plata.

Ella una vez estuvo mas tranquila comenzó a explica que mientras ella estaba preparando la comida.

“Harriet Bowman, la propietaria, acaba de llamar. Viene hacia aquí y trae consigo a ocho personas para cenar. Lilly y Kate están fuera en el cine, y no estoy segura que si llevan consigo los móviles, y la señora Hughes esta fuera comprando telas. Nunca solemos tener a nadie por aquí los miércoles. Así que tengo que manejar todo esto yo sola”

“yo puedo cocinar, ¿quieres que te ayude?”

“la señora Hughes nos dijo que te mantuvieras alejado de Madam Bowman. Ella va a ir a la cocina, estoy segura. Ella también, probablemente, pasee por la casa y mire nuestras cosas, lo sé porque la conozco”

“mierda”

“si, nunca mejor dicho. Mira si quieres ser útil, corre hacia el cine y mira de encontrar a Lilly o Kate”

“¿no se? Y si están en el interior y no las encuentro”

“compra una entrada. Solo hay cuatro salas… búscalas” Georgia cogió el bolso de sobre el mostrador, saco un billete de veinte dólares. “te voy a pagar por ello. Solo tienes que ir a buscar un poco de ayuda”.

Charlie estaba parado tratando de asimilarlo todo.

“por favor.. Después simplemente te puedes quedar en el cine y ver la película ¿de acuerdo?”

Charlie cogió la bicicleta de la señora Hughes que tenia fuera el porche de atrás, la que solía ir locamente a la ciudad. En cinco minutos se presento en el cine. Todas las películas ya habían empezado, así que no había nadie afuera esperando. Compro una entrada para una película de dibujos, y busco arriba y abajo en busca de las chicas. Al no encontrarlas, repitió el proceso con las otras películas de las diferentes salas, pero una vez mas, no encontró nada.

Esperemos que cuando la película termine, ellas vuelvan a casa, Charlie dijo con furia. Cuando llego pudo ver varios coches de lujo enfrente de la casa, y corrió por detrás para entrar en la casa, miro por la venta y vio a Georgia en la cocina tratando de juntar todo. Se detuvo un momento y pudo ver que sus brazos estaban temblando, y que parecía que estaba a punto de echarse a llorar, pero ella todavía estaba logrando mantenerse de pie poniendo bandejas en el horno.

Subió por las escaleras, sin entrar en la cocina, y llamo a la puerta de Lilly. No obtuvo respuesta. Luego llamo a la puerta de Kate. También si respuesta. Abrió la puerta de Lilly con la remota posibilidad de que estuviera allí escuchando música, o durmiendo, o de obtener alguna pista de donde estaban. Cuando entro lo que vio, fue su uniforme de doncella puesto encima de la mesa.

Era un vestido simple de color amarillo, a medio camino entre un uniforme de camarera a uno de cocinera. Por supuesto, pensó en el hecho de que todo el mundo decía que se parecía a una chica con el delantal. No sería realmente diferente usando dicho vestido, a menos que él lo usara sin pantalones. Aun así, no sabía si iba a trabajar.

Se detuvo un momento a deliberar, se quito la ropa y se metió dentro del vestido. Era mucho más fácil de que le pensaba. Se abrocho la parte delantera, y realmente no era muy diferente de cuando se ponía una camisa larga. La ropa interior de chico estaba cubierta, y él no estaba afeitado pero aun así se le veía bien, a excepto de que tenía un poco de pelo en sus piernas. El corrió hacia el cuarto de baño que compartía con Georgia, cogió una maquinilla de afeitar y en solo dos minutos su pelo quedo fuera.

É no tenía zapatos a juego, y cuando trato de probarse algunos de las chicas, se encontró que eran demasiado pequeños, por lo que corrió descalzo hacia el despacho de su tía y trato de buscar algo. Pero lo que encontró aun era demasiado pequeños, pero por poco. Así que al final se pudo poner unos que le iban justos.

Corrió hacia la cocina, se preparo para oír a Georgia reírse. Pero ella no estaba allí. Esta fuera cogiendo el pedido de la Sra. Bowman. Charlie podía oler algo que empezaba a oler a quemado. Se acerco, se puso el delantal, y se dio la vuelta en el momento justo para ver a Georgia como entraba en la cocina.

Su rostro pasó por varias expresiones. Cuando ella se abrió paso a través de la puerta, llevaba una falsa sonrisa que había estado manteniendo para los huéspedes. Tan pronto como se cerró la puerta, su cara cayó en el desamparo de sorprendida a saber que estaba jodida por completa. Cuando vio a otra chica en la cocina, ella suspiro de alivio. Y cuando vio que era Charlie, sus mejillas se volvieron de color rojo brillante.

“no pude encontrarlas. Esto ha sido lo que mejor he podido hacer, ¿crees que funcionara? De lo contrario puedo correr y esconderme”

Georgia se recompuso. Hablo con timidez. “no sé si lo has hecho bien. Creo que la señora Hughes tenía razón cuando dijo que te parecías a tu madre”

“que tal mis piernas? Me las depile antes de bajar”

Georgia asintió en silencio, “se ven bien”. Ella parpadeo, sacudió la cabeza y salió de ello. “está bien, esto puede funcionar. Solo quédate en la cocina y cocina. Voy a hacer de camarera. Pero probablemente volveré en algún momento, por lo que solo se amable.”

“¿debería tratar de hablar como una chica?”

“tu voz está bien. Yo no me preocuparía por eso. Eso sí, no hables como un chico. Además, si ella te pide alguna cosa tu nombre ahora será…. Charlotte. ¿De acuerdo?”

“Bueno” Charlie, hizo un gesto con la mano izquierda.

“no, no. Con una reverencia, así”, Georgia, llevo sus manos a ambos lados de su vestido y se inclino hacia adelante.

Charlie la imito. “¿Así?”

“así se debe hacer”. Georgia puso su sonrisa falsa de nuevo, y salió hacia el comedor, con la cesta del pan.

LA cena fue por buen camino, y cada vez que Georgia entraba en la cocina, ella parecía más y mas relajada, hasta que la sonrisa falsa dejo de serlo, estaba radiante.

Alrededor de una hora, la señora Hughes regreso a la casa. Ella vino desde el garaje de la parte trasera de la casa y en silencio entro en la cocina. Cuando vio a Charlie, ella se encogió de hombros y se rio “hey Charlie, bueno, entonces supongo que lo tienes cubierto”

“si, incluso llevo sus zapatos”

“gracias. Madam Bowman sabe que estas aquí?”

“no la he visto todavía. Georgia le dijo que yo me llamaba Charlotte. ¿Me ves bien?”  Se puso recto con la espalda recta y se presento.

“haber gira alrededor”. La Sra. Hughes hizo un movimiento circular con el dedo.

Cuando Charlie se dio la vuelta, los lados de su vestido volaron y se alzaron. “¿Cómo me ves?”

“Wow. Gracias por ponerte este equipo para esta noche. Te veo igual que a tu madre. Podrías utilizar unas enaguas, pero te veo muy…bien”

La Sra. Hughes salió hacia el comedor y hizo su trabajo que era el de entretener a Madam Bowman. Justo antes del postre, llamo a Charlie, como Charlotte, a la habitación principal, y lo presento a la Madam y sus amigos. Fueron muy educados y Madam Bowman felicito a Charlotte por la cena, pero en realidad no querían hablar. Después de la cena, la Madam hizo un recorrido por la casa con las chicas, y otra vez Charlotte le siguió aunque “ella” no dijo mucho.

Cuando la Madam Bowman se había marchado, Georgia se acerco y beso a Charlie en la mejilla. “yo solo quería decirte gracias. Realmente me has ayudado”.

Lilly y Kate salieron por la puerta trasera. Habían salido a por un helado después de la película, y se habían olvidado de encender sus móviles de nuevo. La Sra. Hughes les reprendió, aunque suavemente, y luego las dejo. Lilly hizo te para todos, se sentaron juntos y charlaron. Kate se burlo de Charlotte por pretender ser un chico todo este tiempo.

Las chicas subieron a las habitaciones, y Charlie devolvió el vestido a Lilly.

A la mañana siguiente, Charlie despertó al oír unos golpes sobre su puerta. Él pensó que sonaba demasiado ligero para ser alguien que llamaba, pero cuando abrió la puerta se encontró con Georgia con la cara roja y con tres vestidos en la mano son sus perchas.

“Buenos días, Charlie, no quiéranos hacer gran cosa de esto…pero por si acaso volviera a suceder que la Madam volviera…  hable con la señora Hughes y ella también pensó… pensamos… que estaría bien estar preparado”.  En las perchas había tres vestidos uno amarillo de cocinera, uno de gala negro y blanco, y el último de lujo de color marrón oscuro.

“oh!, vale, pero no sé si voy a volver hacerlo, otra vez”

Georgia se puso tensa y rompió el contacto visual. “es que solo pensé que si querías… no tienes que…”

“Gracias, Georgia. Supongo que no hará daño a nadie en ponerlos en mi armario. Aunque no tengo zapatos o algo para ponérmelos, así que no sé si será útil sin estos”.

Charlie miro brevemente los vestidos, suspiro y los colgó en la parte posterior de su armario. Cuando se dio la vuelta, Georgia ya se había ido.

Charlie volvió a trabajar en el jardín y ayudo a Kate en la cocina esa noche, con su traje azul oscuro. Georgia no la vio en todo el día. Era su día libre, y podía haber sido secuestrado por extraterrestre todo el hotel y ella no se hubiera enterado, regreso después que el comedor hubiera cerrado.

Charlie estaba sentado tranquilamente en su habitación, navegando por la web cuando oyó golpes en su puerta. Cuando la abrió, Georgia esta fuera en el pasillo con un paquete, “Hey Charlie, siento lo de antes. Tienes razón sobre los vestidos, te he traído algo”.

Al principio, Charlie pensó que era una broma cuando abrió el paquete y encontró un par de zapatos de tacón de su talla, un pack de tres bragas y sujetadores, una bolsa de semillas para pájaros, una maquinilla de depilady, unas medias y un puñado de cosméticos. Miro a Georgia, ella no se reía, tampoco estaba sacando la lengua. Ella estaba esperando nerviosamente para ver si lo aprobaba.

“Gracias, pero eso no es exactamente lo que quise decir. Quiero decir que no voy a empezar a comportarme como un chica ahora”

Georgia parecía sorprendida. “lo siento, pero como dijiste que no tenias nada que ponerte con los vestidos, yo pensé que… soy tan estúpida”

“gracias por el regalo. Pero no estoy muy seguro de cómo tomármelo. ¿En que estabas pensando?” Charlie trato de decir la última parte sin que sonase como una acusación.

“solo pensé, que podría ser útil para ponerte en los vestidos, solo para ver cómo te sientes. Y entonces pensé que no tenias todas las cosas que necesitabas, y fuiste tan gentil en ayudarme la otra noche, y como he sido tan mala contigo, y quería hacer las paces. Te veía tan bien con el uniforme de la cocina, supongo que pensé que te tenía que gustar vestir así. Quiero decir que si yo fuera tan guapa como tú, te gustaría. No tenemos que decirle a nadie. Puedes probarte estas cosas aquí, y te puedo ayudar…” Georgia su voz se fue apagando cada vez mas sonaba mas deprimida.

Charlie seguía mirando a trabes de la bolsa. Vio un recibo que estaba al final de la bolsa en la parte inferior. Lo miro sin sacarlo de la bolsa, por lo que Georgia no podía ver. Pensó ochenta dólares. Eso es muy dinero.

“está bien, lo podemos intentar una vez, solo para ver, cuando nadie me mire, y no podemos decirle a nadie”

Georgia, prácticamente salto y cerró la puerta. Charlie se sorprendió porque no había querido decir ahora, pero estaban solos así que se fue junto a ella.

Ella espero mientras él se afeitaba su cuerpo en el cuarto de baño. Él salió con una bata de baño y ella le dio unas bragas para que se las pusiera mientras ella miraba para otro lado. Ella le enseño a ponerse el sujetador, comenzando hacia atrás y girando a su alrededor, luego le lleno las dos copas con las bolsas de alpiste.

Se tumbo en la cama y mantuvo las piernas hacia arriba, mientras ella le ponía las medias blancas. Sentía como el suave material y sedoso subía por las piernas. Sus piernas eran muy sensibles al estar recientemente afeitadas, podía sentir el estiramiento del material y cada movimiento.

Georgia cogió el vestido de criada blanco y negro. Ella le puso y subió la cremallera de la espalda. Se miro al espejo, sus piernas parecían más delgadas, y el sujetador rellenado, quedaba muy bien el vestido, todo era delicado y femenino.

Georgia lo sentó frente al espejo del baño. Ella le puso un poco de base de maquillaje en la cara con un esponja hasta que se vio limpio y suave, como una muñeca de porcelana. Entonces ella le hizo que se quedara quieto mientras ella le ponía rímel en sus ojos. No hizo nada elaborado, pero quería hacerlo bien,  y cuando termino, sus ojos se esbozaron limpiamente en negro y gris.

Él protesto cuando ella llego con la barra de labios, pero ya había llegado demasiado lejos y un detalle mas no tenía importancia, su cuerpo empezaba a funcionar como si fuera de una chica. Georgia puso el pintalabios de color burdeos. Luego lo llevo de regreso al dormitorio, donde ella le ato un delantal, un corbatín rojo, y un pequeño sombrero blanco con un lazo en pelo rojo, sobre él, completando el uniforme, se miro al espejo juntamente con ella.

“Wow, Charlotte. Te voy muy femenina”

“la señora Hughes mantiene en broma que me parezco a mi madre. Es tan extraño. Es como si mirarse a otra persona”

“¿te gusta?”

“como diversión un poco. Parece realmente extraño. Yo no me reconozco en absoluto. Pero eso es lo que lo hace divertido.”

“sabes que podrías salir como si fueras una chica y que nadie se daría cuenta. No quiero decir que debas. Solo que puedes”

“y pensé me estaba empezando a realizar un gran trabajo, con todo el trabajo del jardín. Supongo que tendré que esforzarme un poco mas”

“no es tan malo? quiero decir que de día serias un hombre. Pero ahora mismo, si quieres puedes pasar por chica mejor que chico, ¿Por qué no disfrutar de ello?”

“supongo que sí. Es simplemente extraño. ¿Por qué haces esto conmigo?”

“¿Qué quieres decir?”

“tu sabes. Eres muy sarcástica cuando soy un chico, y ahora pareces mucho… mas amable cuando llego este vestido”

“…no sé. Yo solo me llevo bien con las chicas. No me refiero a… solo que soy de esta manera. Es muy raro para mi cada vez que te veo… te veo como Charlotte, me gustas mas. No sé como explicártelo.

“has sido muy amable conmigo, en general…”

“si, pero yo pienso en ti como una chica que finge ser un chico. No puedo dejar de pensar en ti de esa manera”

“normalmente, me sentiría ofendido, pero ahí está”. Charlie se encogió de hombros y apunto a Charlotte en el espejo.

“gracias por vestirte. Significa mucho para mí.” . Georgia lo abrazo suavemente y luego se alejo. Él se volvió hacia ella. Ella estaba conteniendo la respiración, como si estuviera esperando algo. De repente, dio un paso hacia él y lo beso. Sus labios se masajearon mutuamente y Charlie se lleno de una cálida sensación de embriaguez por todo su cuerpo y se relajo. Georgia, se abrió paso entre sus labios con la punta de la lengua, y toco la suya. Ella se aparto, y corrió por el cuarto de baño hacia su habitación y cerró la puerta.

Al dia siguiente, mientras Charlie estaba cortando el césped, Georgia saco una bandeja con dos limonadas y se sento con él en el marco de la glorieta.

“hey Charlie, yo solo quería decir que siento lo de anoche. Me tome las cosas demasiado fueres y fui demasiado lejos, no volverá a ocurrir. Espero que no díras nada a nadie de eso”

“no, si esta bien. No fue tan malo. quiero decir que se que era inapropiado y todo, peor no es lo como me sentía en ese momento, me sentía bien”

Georgia se enderezo, “¿en serio? Estoy tan contenta de que te sientas de esa manera también. Simplemente no quería menterte en problemas”

“¿Qué problemas podía tener?”

“ya sabes, si hacemos eso en tu habitación casi podríamos hacer cualquier cosa. Es demasiado tentador”

“me gusto mucho, la ultima parte al menos. Pero, yo no quiero que me echen”

“¿te gustaría probar otra vez, si pudiéramos estar seguros con ello?”

“¿Cómo podemos hacerlo mas seguro?

“Estaba pensando… Charlotte y yo podríamos ir a un lugar público. Algún lugar donde pudiéramos hacer algo mas que mirarnos fijamente el uno con el otro con torpeza.”

“¿quieres que vaya a la ciudad con un vestido?”

“nadie sabría que eres tú. No si nos quedamos lejos de la señora Hughes y de las otras chicas. Podríamos ir a ver una película o algo así. Así podríamos estar solos, pero no totalmente”

Georgia lo veía mucho mejor con el vestido, tal vez era ella lesbiana… y con el vestido no se había visto tan mal, no lo odiaba, y no era probable que los atraparan, así que dijo “Bueno”

“¿en serio?”

“claro, porque no”

Georgia se lamio los labios “bien! Vamos a escaparnos después de la cena e ir hasta el teatro”

Esa noche, Georgia le ayudo a vestirse de nuevo. Ella era más tímida que la última vez, y se quedo sin intervenir, a excepto cuando ella le ayudo con el maquillaje. Las dos llevaban vestidos marrón oscuros similares como los que solía llevar la señora Hughes. Ella solo los usaba para ir a la ciudad, cuando pensaba que sería mas seguro para ellas si se visten con autoridad.

Se escurrieron por la venta y se dejaron caer al porche sin ser vistas. El sol acaba de ponerse las luces de la calle estaban empezando a parpadear, y cuando sintieron que la oscuridad les ocultaba, se cogieron de las manos. En el teatro, Georgia sugirió ir a ver una documental sobre áfrica. Esa sala estaba a menos de una cuarta parte, y los dos se podían sentar en la parte trasera pasando muy inadvertidos.

Georgia comenzó frotando su pierna contra la de Charlotte. Charlotte respondió levantando el reposabrazos y apoyándose contra Georgia, que ella respondió recogiendo sobre el vientre de Charlotte, luego deshizo los botones, a continuación, puso la mano dentro del vestido y con su dedo fue pasándolo alrededor del ombligo de Charlotte dando vueltas. Las dos recogieron la falda de cada uno y empezaron a tocarse las piernas hasta que se volvieron locos. Por último, Georgia comenzó a mordisquear los labios de Charlotte. Era una película corta y cuando termino. Se fueron al lavabo de señoras a arreglarse sus maquillajes y luego corrieron al hotel. 

Ellas estaban seguras de que todo el mundo estaba lejos, así que no volvieron de escondidas. En su lugar, solo se acercaron a la habitación de Georgia y se sentaron juntas en la cama. De golpe hubo un golpe en la puerta, y mientras las dos se estaban mirando una a otra estupefactas, la señora Hughes abrió la puerta y entro.

“Ah, Ha!” dijo ella con un tono divertido.

“no es lo que parece”, contesto Georgia rápidamente

“Así que tu y Charlotte queríais escaparos a la ciudad esta noche?”

“no, nunca…” dijo Charlie. De repente tenía su tía delante de él mirando todo su maquillaje.

“mira. Me alegro que fuese eso. Era eso o vosotros estabais teniendo relaciones sexuales. La verdad me siento aliviada”

Las otras chicas que habían oído por casualidad la conversación, ya que estaban mirando desde el pasillo.

La Sra. Hughes se volvió hacia el pasillo y dijo. “niñas tranquilas todo está bien. Georgia y Charlotte, solo querían escaparse y a ver una película”

“mira Charlotte, si tu quieres experimentar de cómo sería ser una chica, creo que aquí no habrá nadie que se burle de ti. Quiero decir que todas lo aceptamos, ¿no?” dijo mirando hacia el pasillo.

Kate asomo la cabeza, “te veo muy bien”

Lilly estaba riéndose, pero le dio a Charlotte una cálida sonrisa. “Claro, puede ser nuestro pequeño secreto. Además no queremos que  vuelva la Madam Bowman y ve a Charlie”

La Sra. Hughes hablo de nuevo. “Está bien, así que vamos a probar esto. Mañana, Charlotte, ¿Por qué no pruebas algunas de las tareas más habituales. Tendrás la oportunidad de usar estos uniformes durante el trabajo del hotel”

Charlie pronto fue muy consciente de sí mismo. “no sé si estoy listo para haces esto”

“bueno, estas experimentando esto ahora mismo, prefiero que lo hagas donde pueda verte. Será fácil para ti. Lo prometo”

“está bien, pero tal vez solo por un rato”

“me parece bien. Y otra cosa, sé que es tarde. Pero me sentirá mejor si Charlotte y Kate se cambiasen las habitaciones. No quiero sorpresas.”