La princesita de la hermana

Traducido de un texto de StickySteph

Yo siempre había tenido curiosidad por la habitación de mi hermana. Siempre que sus amigas venían, ellas se apresuraban a subir las escaleras y cerrar la puerta tras ellas, era una zona reservada a chicas. Siempre que trataba de unirme a ella, ella desafiante me tiraba contra la pared y me decía que estaba fuera del alcance de la gente como yo. ¿Qué clase de personara era yo?

Yo era un chico.

Desterrados de esas tierras, que nunca llegaría a experimentar esas increíbles cosas como el maquillaje, chismes, y lo que las niñas han tan condenadamente, ruidosamente y molesto. Día tras día, volvería a ver a mi hermana saliendo de su habitación, con un fuerte olor de chica tras ella. Haríamos el contacto visual, y me quedaría a un paso atrás y cerrando la puerta. Ella cuando salía cerraba su habitación con llave. Era un lugar de misterio para mí.

Un misterio, hasta hoy.

Ya han pasado unas cuantas primaveras, desde entonces, un día después de ir al baño, me acerque al fregadero para lavarme las manos. A través de la puerta, podía oír los sonidos apagados de una conmoción menor en la entrada principal. Era el sonido familiar de una persona que se pone torpemente sus zapatos, pierde el equilibrio y cae contra la pared. Mi hermana nunca había sido una experta en las simples tareas, y esto era un parte de su lista de incompetencia. Después de eso, pude oír las pisadas de sus pies, abrir la puerta y salir.

Yo, abrí la puerta. Eche un vistazo a la habitación, sin ver nada, excepto unos zapatos colocados ordenadamente junto a la puerta, el gato dándose un baño, y… la habitación totalmente abierta delante de mí!

Una emoción absoluta exploto en mi pecho! Podía sentir latir mi corazón golpeando contra la pared de mi pecho. Corrí escalaras abajo y tire las cortinas a un lado para asegurarme de que ella se había ido en realidad. Efectivamente, mire y vi como el coche se iba por la carretera. Esta era mi oportunidad, mi única y verdadera oportunidad! Pensé. Corrí escaleras arriba y entre hacia la habitación, disfrutando de cada segundo de la emoción que estaba experimentando.

La puerta se abrió lentamente, derramando una luz brillante de color rosa por el pasillo. El olor del lugar era increíble. Empuje la puerta abierta y entre en el reino prohibido, sintiendo la suave alfombra de terciopelo envolviéndose alrededor de mis pies. Sonreí, suspirando suavemente, mientras estaba allí, oliéndolo, mirándolo todo. Cerré los ojos y creí por un segundo que yo era ella, esperando a que Jody me viniera a buscar para ir de fiesta.

Abrí los ojos y me concentre en un piula de ropa que descansaba en el suelo, fuera de su armario. Todo estaba allí, el jersey rosa, los pantalones vaqueros ajustados, el sujetado y montones de ropa interior. Extendí la mano, y me encontré con la delicada tela del suéter, corriendo a lo largo de mi brazo, imaginando lo que sería llevándolo puesto. Esto me planteaba la pregunta, “¿Por qué no me lo ponía? Mama y papa estaba en el trabajo, mi hermana se ha ido…”.

Rápidamente me quite la camisa y deslice el jersey por encima de mi cabeza, la suave caricia del cachemir corrió por mis brazos, la espalda y el pecho. Me desmayaba con la pasión de la tela abriéndose paso por mi cuerpo, pasando hasta mi cintura. La fantasía de llevar ese suéter siempre se me había quedado en el fondo de mi mente, pero nunca creí que realmente iba a suceder realmente. Esto era real. Encendí su equipo de música, me recosté y escuche el sonido relajante de la Srta. Spears, disfrutando de mi primera visita a la habitación de mi hermana.

El ritmo de la música era genial, el ritmo realmente me había sobrepasado. Me puse de pie y comencé a balancear mis caderas hacia atrás y hacia adelante al mismo ritmo, dejando que la música se filtrara por mi piel. El ritmo se volvió errático y pareció cambiar de repente. Qué extraño, nunca me acordaba de la canción que hiciera esto. Estaba a punto de acercarme y darle al equipo de música un pequeño golpe cuando una sensación de infarto de apodero prontamente de mí y me quede congelado en seco.

Mi hermana estaba en casa!.