La princesita de la hermana Tercera parte

Esto no era cierto. Yo no quería ser una chica, simplemente me gustaba la ropa. Negué con la cabeza.

“porque si quieres ser una chica…” ella sonrió, lentamente moviéndose hacia adelante. “Nosotras lo podemos hacer *convertirte* una chica!”

Me escabullí por delante de ella y trato de taparme a través de la multitud de chichas la salida. Fue inútil. Todas se rieron y me retuvieron, agarrando por los brazos y las piernas y fijándome firmemente al suelo.

“quitarle los pantalones y los calcetines!”

Sus amigas lo hicieron al acto. Mi cremallera bajo y mis tejanos los quitaron, lo calcetines se cayeron, Jody logro tirar de mi ropa interior sacándola. Mi hermana sonrió.

“es hora de prepararlo para la transformación” dijo ella, mientras se reían todas sus amigas.

Una de las chicas agarrándome mis piernas se animo y le pregunta. “¿Cómo debe vestir esta princesa?”

Mi hermana se levanto y corrió hacia el armario, moviendo rápidamente perchas de distintos vestidos, camisas y pantalones. Yo no podía ver lo que estaba buscando pero, a juzgar por el chillido de la emoción de ella y de sus amigas, pude considerar que lo encontró. Oí como nerviosamente lo sacaba del armario, un ruido de satén lo acompañaba. Sonaba mucho, grande, y…

Regreso sosteniendo un vestido de fiesta. La prenda era un vestido de fiesta completo, que empezaba por el cuello y llegaba hasta los tobillos. El vestido era enormemente voluptuosos, y extremadamente vaporoso, con unas enormes enaguas. El color coincidía con el de la habitación, rosa.

“ponérselo!”, ella ordeno. “vengo en seguida, quiero coger unas cuantas cosas, mas!”

Arrojo el vestido a mi lado y salto sobre mí, para irse de la habitación. Las chicas que sostenían mis piernas apretaron un poco mas cuando empecé a retorcerme para liberarme desesperadamente, fui inútil

Jody se arrodillo en mis brazos, lo que le permitía a la otra chica abrir totalmente el vestido deslizando una larga cremallera y abriéndolo de par en par, poniendo lo sobre mis pies. Las chicas sostenían mis piernas que se movían agarrándolas más y mas, el vestido se deslizo por mis piernas, entonces de repente de un tirón los subieron hasta la cintura. Después de me dieron la paras subir un poco mas hasta llegar a la parte de atrás. Locamente patee mis piernas, sintiendo el peso del vestido y de las enaguas alrededor de mis piernas. A Jody le encanto.

“Cálmate princesa!”, ella se echo a reír, mientras ayudaba a las otras las largas mangas ajustadas del vestido.

No soy un chico muy grande, así que el vestido quedaba un poco flojo alrededor del pecho cuando terminaron de poner las mangas, podía sentir el suave tejido de seda de unas bragas que subían por mis piernas hacia trasero. Después todas aplaudieron y gritaron de alegría.

“Chelsea! ¿Dónde estás?” Jody llamo. Chelsea era el nombre de mi hermana.

Una risita débil llego subiendo de la escalera, seguido de mi hermana dando saltos tan rápido como podía. Entro en la habitación sosteniendo diversos objetos, de los cuales se aferraba estrechamente contra su pecho. Yo no podía ver ninguno de ellos mientras iba hacia la cama, los dejo caer sobre la colcha. Se dirigió al armario, cogió un sujetador, y tiro de la parte delantera del vestido hacia abajo. Era un sujetador de encaje que corrió por mi pecho, sobre mis hombros y mi espalda. Antes de que pusieran la parte de arriba del vestido, mi hermana corrió hacia la cama para coger algunos de los artículos.

Cogió tres cosas: dos globos de agua, un tubo largo y blanco.

Los globos eran grandes. Muy grandes, al igual que el tamaño de los bolos de Bowling. Los puso y los de dejo caer en las copas del sujetado con bastante facilidad, uno después de otro. El sujetador tenía mas fuerza a medida que se retorcían para ponerlo. Antes de cerrar los cierres, mi hermana puso ese tubo blanco en los cierres y roció algo en los dos extremos del cierre. Luego el resto de las chicas volvieron a poner el vestido sobre hombros. La cremallera subió lentamente, el vestido cada vez me apretaba más y más fuerte, ya que se ceñía alrededor de mis nuevos pechos, y finalmente mi cuello, mi hermana corrió otra vez a coger ese tubo largo y blanco y lo puso a lo largo de la cremallera todo el rato. Una vez que hubo subido la cremallera, rápidamente la corrió de nuevo hacia abajo, y de nuevo hacia arriba. Jody saco un secador de pelo y lo encendió y comenzó a moverlo lentamente a lo largo de la cremallera. Fue entonces cuando me di cuenta de que había puesto pegamento al sujetador y la cremallera del vestido.

Empecé a gritar y a revolverme, manteniendo el equilibro sobre la parte superior de mis nuevos y enormes pechos, se oía el ruido del vestido moviéndose, todas las chicas se reían histéricamente.

“para de gritar, o si no te pagamos la boca”, dijo mi hermana severamente, moviendo el tubo cerca de mi boca como si se tratara de una arma cargada.

“tenemos un poco mas de preparativos antes de que la princesa pueda ir al baile!”

Mi hermana agarro unas botas que hacía varios años atrás mi padre las había desaprobado, junto un par de medias de red. Pusieron las medias en mis piernas, levantado el vestido hasta la cabeza para conseguir tener las piernas libres. Pusieron un chorrito de pegamento alrededor de casa pierna, y pusieron las medias en su lugar. Me puse a llorar.

“awwwww!” dijeron todas a la vez. Fueron realmente absorbiendo mi reacción enteramente. Mi hermana abrió la cremallera de las botas y vertió el pegamento en todo el interior de cada una. Las chicas empujaron mis dos pies enfundados a las medias de rejilla dentro de las botas, y subieron la cremallera. Sentí el agarre frio de la adherencia del pegamento en la piel, cada vez mas firmemente con cada segundo que pasaba. La botella subió corriendo por las cremalleras, por si acoso el pegamento del interior no hubiese sido poco.

Mientras que las botas estaban siendo empujadas hasta mis pies, ella cogió la cola y empezó a volcar su contenido en otros dos objetos, unos guantes, unos guantes largos de PVC de color rosa, que ella había llevado al baile en su interior revestido del material pegajoso, empezaba a subirme por las manos, y las chicas fueron empujando hasta llegar a mis codos. Estaba todo cubierto de adhesivo, y no me gustaba en absoluto.

“párate!”, dijo Jody rebotando hacia arriba, emocionada al examinar el trabajo que habían hecho. Me levantaron y me pusieron de pie. El peso de mis enormes pechos me tiro hacia adelante, y con esos tacones me tropecé. Intente recuperar mi equilibrio, pero el vestido era demasiado para mi, y acabe pisándolo y cayendo hacia adelante en la cama. La habitación se lleno de carcajadas. Podía sentir el agua caliente de dentro de los globos que empujaban con fuerza contra mi piel mientras trataba de ponerme de pie de nuevo. Una vez de pie, me tambalee hacia atrás y adelante con cuidado, el peso de los pechos y el vestido moviendo hacia atrás y adelante ligeramente. Mi hermana se fue al armario y saco una caja.