Texto traducido de
un blog, que está aquí en mi lista de blogs
Mi esposa me encerró el
otro día en un dispositivo de castidad. Cuando lo hizo, me dijo que nunca más
se me permitiría tener sexo como un hombre de nuevo. A mí no se me volvería a
permitir tener relaciones sexuales con ella de nuevo, pero le podría dar
servicio por vía oral, con una correa en mano y un arnés en la cara. Sin
embargo ella, buscaría hombres de verdad cuando ella quisiera una polla de
verdad, y esperaba que yo limpiara a sus amantes u otros servicios que ella
quisiera. Además, solo se me permitiría sacar mi semen cuando le suplicara de
rodillas.
Ella me explico que
acudir a ella en cualquier momento, con la frecuencia que quisiera y rogarle
que me le liberase para que pudiera acabar. Sin embargo, solo podría ir vestido
con ropa interior sexy de chica o un traje femenino sexy cuando le estuviera
pidiendo que ella me liberase. Y tendría que suplicar de rodillas y rogarle que
me liberase de mi castidad para que yo pudiera acabar a mí mismo.
Ella escucharía mis
suplicas, miraría mi equipo y decidiría si realmente podía ser liberado o no por la forma en que estaba vestida, y lo
estaba pidiendo. Tenía que mantenerme rogando y seguir a su alrededor hasta que
ella me digiera si o no.
Si ella decidía que no
me iba a dejar liberarme en ese momento, yo era libre de intentarlo de nuevo más
tarde con un equipo diferente. Si accedía a dejarme salir me tenía que ir de
inmediato para coger un plato, un consolador grande, pinzas, guantes de látex
de esos para lavar la vajilla de color rosa y un poco de loción perfumada.
Tendría que reunirme con ella en la sala de estar de rodillas junto donde ella
estuviese sentada y esperar que entrase y se sentase. Cuando ella estuviese
sentada ella se reía y me humillaba con sus palabras.
Antes de desbloquearme
estaba obligado a ponerme los guantes de látex de color rosa, lubricar el gran
consolador y follarme con él, mientras ella me miraba y se burlaba verbalmente
de mí. Ella me miraba durante bastante tiempo y me decía cosas, como puta,
perra, sissy, etc. Ella se burlaba de lo inútil que soy, de lo pequeña que la
tengo, y lo patético que soy como hombre, de cómo, debería ser convertida a una
mujer para ella, por lo mucho que me gustaba ser follado por el culo, y que
encontraría una verdadera polla para mi culo, para después saborear el semen en
mi boca. Cuando ella ya había tenido suficiente espectáculo me obligaba a
meterme el consolador hasta el fondo y dejarlo allí dentro mientras ella
buscaba la llave de mi castidad.
Colgando la llave
delante de mí, ella vuelve a requerir que yo suplique por ello. Ella lo hace
cuando le dijo lo puta que soy y que quiero desesperadamente ser follada. Con
el tiempo dice que tirara la llave para que ya nunca más se pueda abrir el
candado. Mientras estoy ocupado para conseguir que me quite el dispositivo,
ella ha puesto un DVD y se establece de nuevo en su silla. Y yo estoy obligado
a quedarme delante de la TV, poner una pinza en cada pezón, y con los guantes
puestos, y poco de crema perfumada, empezar a tocarme los huevos hasta que ella
me diga que pare.
El DVD se inicia, como
siempre es el mismo tipo de porno gay y espera hasta que empieza la escena de
sexo en grupo antes de liberarme del dispositivo de castidad. Uno de los
hombres, obviamente, es la chica para todos los otros de la habitación. Ellos
lo utilizan por el culo y la boca sin reservas, eyaculando en su cara y en todas
sus aberturas sin tocar su polla y luego comienzan de nuevo. Esto es lo que
ella quiere, cuando empiezan con su polla, ella me ordena que empiece a
bombear, con mis manos enfundadas en los guantes de látex. Me obliga a decir “quiero chupar pollas, quiero una polla
dentro de mi culo”, me hace ir despacio y que mire en todo momento la
película Gay. Me muevo y se burla de mí diciéndome lo mucho que le gustaría
verme en esa posición de la película, y que me vestiría como un transexual
cachondo, y tenerme para esos tipos de servicio para su diversión. A medida que
va diciendo sus sugerencias se construyen imágenes en mi mente y de la emoción
construida mi polla explota inundando de semen el plato.
Una vez que he
descargado, tengo que dejar que el DVD acabe, mientras lamo todo el semen del
plato y se burla un poco más de lo acerca que me gusta, y que querría que fuese
su puta sissy. Cuando termino de chupar todo, inmediatamente me vuelve obliga a
volver a ponerme le dispositivo de castidad y le tengo que dar la llave a ella.
Una vez que está bloqueado de nuevo y me tengo que arrastrar a sus pies.
Ella me ata las manos
encima de la cabeza con la ayuda de un gancho en el techo, y procede a azotarme
con un látigo al menos de diez veces, pero a menudo son más de veinte.
Asegurándose que yo quedo marcado, incluso a veces consigue que llore, antes de
detenerse.
Durante los azotes ella
me dice lo patético que soy y lo pequeño que tengo el pene. Recordando lo sissy
que soy y lo mucho que me gustaría tener una polla de verdad en mis manos.
Las últimas cosas que
hace antes de desatarme es exprimir las pinzas que tengo en los pezones
mientras las va quitando lentamente, después tira hacia fuera del consolador de
mi culo. Lo limpia un poco y me lo mete en la boca, para que entienda que soy
una perra, y lo va sacando y entrado rápidamente, hasta que consigue que me
atragante, después ella ríe.
Finalmente me descuelga,
y dice que me limpie y me vaya a vestir como la puta que ella quiere que sea.
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