Sissy Wendy escucho llegar el coche del Maestro,
comprobó desesperadamente su apariencia en el espejo, si, su vestido largo gris
era correcto, cuatro pulgadas por encima de sus zapatos negros, su delantal
blanco de cuerpo entero limpio y correctamente puesto, las correas sobre los
hombros, el lazo cuidadosamente atado en la cintura.
No se atreve a ganarse un disgusto por parte del
Maestro, solo con pensar con ese bastón terriblemente delgado de cinco pies en
sus manos, elevándolo por encima de sus hombros le hace temblar.
Ella sonrió al ver temblar al sissy, “Bienes a dar
la bienvenida a tu Maestro, puta inútil”.
“Si, señora Judit”, Respondió el sissy, “¿Esta
gorra de sirvienta esta puesta correctamente?, ¿Sissy?” él entro en pánico y corrió
hacia el espejo, si, su pequeño blanco sombrero de sirvienta estaba ligeramente
torcido, rápidamente se lo coloco en la cabeza asegurándose de que las cintas
en la parte posterior cayeran en línea recta por su pelo largo y oscuro, “Oh,
¿Esta mi gorra puesta correctamente señora Judit?”, dijo riéndose, “Si, sissy,
ahora abre la puerta, el Maestro esta impaciente”, el timbre de la puerta
principal sonó largo”, oh no, tenia que correrá hacia la puerta, pensó el sissy.
Salió corriendo del cuarto de baño, el largo
vestido gris restringía cada paso a unos más pequeños, detrás de él podía
escuchar la risa burlona de Judit ante la patética vista que presentaba un
sissy sollozando en lagrimas por no poder responder el timbre de la puerta
antes.
Todo esto había comenzado hacia ya dos años, su
vida como servidumbre y frustración sexual, la doctora Samantha su hermosa
esposa durante seis meses, había dicho, “Cariño nos han invitado un fin de
semana a la casa de del presidente de la compañía, el Sr. John Edwards”.
“¿Tenemos que ir juntos? Sabes que soy muy tímido
con la gente”
“Si querido, se que lo eres, pero no tienes un
trabajo desde que heredaste el dinero de tu tía, mientras que yo trabajo y
tengo que quedar bien” prosiguió dulcemente, “Estoy segura de que me ayudaras a
conseguir que sea bien vista y así poder ascender”.
Incapaz de rechazar, rápidamente acepto, “Por
supuesto, te acompañare”
“Gracias cariño, estaba segura de que lo
entenderías”
El fin de semana siguiente condujeron hasta la
enorme casa del Sr. Edwards, una casa aislada en un parque de mil acres, al
llegar quite el equipaje del coche algo desconcertado porque Samantha había
comprado casi todo su guardarropa pero no había puesto nada de mi ropa allí, al
comentarle esto ella respondió riendo, “Estoy segura de que encontraremos algo
para que te pongas cariño, ahora toca el timbre allí estaba de pie esperando
que la puerta se abriera con la consciente diferencia de tamaño, ella era mas
alta que yo además con los tacones aún se notaba más.
Cuando la puerta se abrió y vi a ese hombre por
primera vez se volvió aun mas consciente de mi baja estatura, allí había un
hombre apuesto de unos cuarenta y cinco años, él se alzaba sobre ella “Samantha
querida que bien verte” dijo con su profunda voz, mirándome con desdén dijo,
“Tu lleva las cosas de Samantha” me sentí humillado por esa manera de hablarme
delante de mi esposa, sin embargo obedecí rápidamente tal era la presencia de
ese enorme hombre que me sentí completamente intimidado, tan pronto como
Samantha y el equipaje entramos en la
casa, el Sr. Edwards cerro la puerta de golpe y dijo, “Tu!, síguenos a tu
habitación”.
“Perdona.. ¿Cómo es que no te refieres a mi
habitación y de Samantha”, pregunte?
“!Nunca me contradigas!” ese hombre chillo,
mansamente seguí a ese hombre y a mi esposa por un largo pasillo y luego
subimos cuatro tramos de escaleras hasta llegar a la cima de esa gran casa,
abrió una pequeña puerta y el hombre dijo “!Entra sissy!”
Escuche a mi esposa reír cuando se dirijo a mi como
Sissy, obedecí y entre en la habitación eso no era una habitación si mas bien
una celda, solo tenia dos metros y medio de largo y las paredes estaban sin
moqueta, una pequeña ventana con barrotes, una cama individual de hierro, una
silla y un pequeño armario, me di la vuelta para protestar y vi a mi esposa
besar apasionadamente a ese hombre.
“¿!Pero que!?” grite
Solo a ese hombre y dijo, “Mira.. te presento a mi
amante, sissy” elevándose sobre él dijo, “Thomas y yo hemos sido amantes
durante años, solo me case contigo para que Thomas y yo pudiéramos controlar
los millones que heredaste”, respondió riendo, “Y ahora tu estas aquí, no
tienes parientes, ni amigos, ni trabajo, así que nadie te echara en falta,
Sissy”.
“No me quedare aquí, no puedes obligarme”, Vi a ese
hombre que apretó el puño y luego sentí un golpe aplastante en el estómago,
después otro en la mandíbula, que me dejo inconsciente, cuando recobre el
sentido me di cuenta de que estaba tendido en una especie de cama de hierro
completamente desnudo con el Sr. Edwards y Samantha riéndose de él.
Sentía que había estado inconsciente durante
bastante rato, luego Samantha dijo, “Si querida te hemos dado una pequeña
inyección para mantenerte controlado mientras te preparamos para tu nuevo papel
en la vida, oh, no te preocupes recuerda que soy doctora capacitada”, “¿Qué me
has hecho, Samantha?”
Ella se rio y dijo, “Mírate en el espejo, Sissy” miré
y vi mi reflejo en el espejo, “Oh, no, por favor, no ¿Qué me has hecho?” Todo
su vello corporal había sido quitado y veía que ahora poseía dos enormes tetas,
Samantha se rio y dijo, “Deberías estar agradecido Sissy, esas tetas son lo
ultimo en desarrollo en nuestra empresa, completamente realistas y bastante
complicadas de quitar sin pasar por el quirófano, tienes un par de tetas de la
talla cuarenta y cuatro DD, las encontraras tan pesadas como las reales,
deberías saber que las mías son treinta y seis”.
El Sr Edwards se rio y dijo, “Necesitaras un sostén
bien grande”.
Samantha se echo a reír y dijo, “No me gustaría
cargar con esas cada día de mi vida”, Él dio un paso adelante y me cogió como
si fuese un juguete, colocándome de espaldas a la casa, levanto mis piernas en
alto y las abrió de par en par, un pequeño pinchazo de dos pulgadas sentí, mi
mujer me miro “Te queríamos completamente despierta Susi, o si, ese es tu nuevo
nombre, Sissy cuando te encajemos en esto” saco su mano de alrededor de su
espalda y lo sostuvo delante de mí.
“No, oh no, por favor, no me pongas eso, por favor”
“!Si!” dijo ella, “!Te lo voy a poner ahora!” era
una vagina realista, con las piernas abiertas por el hombre, yo estaba
completamente impotente para evitar que ella pusiera eso, me aplico una especie
de disolvente en la entrepierna, mientras lo hacía me explico cómo funcionaba
esa vagina, “Ves este tubo de adentro, ahí es donde te colocare tu pequeña
polla, lo que te permitirá orinar, sentándote por supuesto, pero me temo que
aunque tu pequeña polla será capa de ponerse erecta no la podrás usar, ni
siquiera correrte pero por supuesto que no la perderás, pero no podrás
satisfacer con ella a ninguna mujer”. Con una sonrisa maliciosa añadió, “Dile adiós
a ella” riendo coloco la polla en el tubo y presiono la vagina firmemente hasta
colocar perfectamente su sitio, la estuvo presionando durante dos minutos
mientras yo suplicaba y sollozaba, “No por favor, no, no lo hagas”.
El Sr. Edwards me soltó, “Ponte de pie, Sissy y
mírate en el espejo”, obedecí a mi nuevo amo y miré el reflejo, emití un grito
lastimero al ver mis enormes tetas y la vagina, acto seguido me caí de rodillas
llorando.
Samantha echo mi cabeza hacia atrás y soltó una
carcajada mientras me arrastraba hacia ella rogándole que me quitara todo, acto
seguido el Sr. Edwards me pateo el trasero y quede tendido sobre mi cara, esto
hizo que Samantha se riera aun mas fuerte, luego se sentó en la cama y él
coloco la silla frente a Samantha la que dijo, “Sissy inclínate sobre esta
silla con tu culo en el aire”.
Me coloque sobre la silla con mi culo en el aire,
luego sentí como el nuevo Amo me ataba los tobillos a las patas de la silla,
ella luego cogió mis muñecas y las ato frente de la silla, estaba completamente
indefenso, grite cuando vi que el Sr. Edwards sacaba un bastón largo y delgado,
“No, por favor no, no, no”.
“Ahora por el momento serán solo diez golpes, sissy”
dijo el Amo
Con lagrimas cayendo por mi rostro, suplique a
Samantha, “por favor, no le dejes que me pegue”, ella con simpatía fingida dijo
“Se que te dolerá, Susi, pero es por tu propio bien, tienes que aprender a
obedecer, ahora se una chica valiente”
“Nooooooo, oh noooooo, nooooo” mis gritos sonaron
por toda la habitación con cada azote, mientras él seguía azotando con maestría
cortando mi culo levantado, “Solo cuatro mas Susi, se valiente”, dijo una sonriente
Samantha mientras yo estaba casi inconsciente de dolor.
Aun así, el Amo continúo levantando le bastón por
encima de su enorme cuerpo musculoso, bajándolo, silbando por encima del hombro
sobre el culo desnudo de mi mientras gritaba, entonces se acabó, diez golpes de
caña, y fui liberado de la silla, me derrumbe en el suelo, roto, sollozando a
los pies del Amo, luego escuche a mi esposa decir, “Ven, Susi, ponte las
bragas”.
Miré hacia arriba y vi a Samantha sosteniendo unas
bragas de nailon rosa, ella dijo, “¿No son bonitas Sissy, unas bonitas bragas
rosa, con bonitos volantes rosas, ideales para una Sissy como tú” Sonrió y
luego de manera cambiada? “Ahora mete tu trasero en ellas”.
El amo rugió, “Ha escuchado, niña, ¿pon tu trasero
en esas bragas o necesitaras más entrenamiento de obediencia?”
“Nooooo, oh, noooooo” grite al ver que el amo
levantaba el bastón y me arrastre hacia mi esposa, diciendo, “Por favor déjeme
ponerme las bragas, señora”.
Samantha sostuvo las bragas abierta por la banda
elástica de la cintura, “Ven mi pequeña dulzura, pondremos estas bonitas bragas
rosas como una buena sissy, no querrás que tu trasero vuelva a ser azotado por
el señor”.
“No, señora” solloce y me puse las bragas, luego
ella las subió hasta la cintura, “Ahí es, Susi aquí tienes tus primeras
bragas”, añadió, “Ahora un sujetador rosa, un bonito liguero y unas medias de
nailon negras, que con estas enaguas con dobladillo rosa con volantes te hará
una bonita cintura” pronto me vistieron completamente con ropa interior rosa
con volantes, luego ella me coloco una peluca negra en la cabeza, retrocedió y
se echo a reír mientras me miraba completamente feminizado, “Pensar que hace
nada eras un hombre”, El señor Edwards se unió a ella en la risa, ahora ponte
el uniforme.
Riendo añadió Samantha, “Si estoy de acuerdo Thomas
es la hora de presentar su nueva vocación”, riéndose en mi cara dijo, “Digo
vocación, Susi, ya que no es un empleo, pues no vas a cobrar por ello”, luego
Samantha se movió hacia el armario, saco un largo vestido gris liso y me lo
paso diciendo, “Póntelo, Sissy”.
Tan pronto que como me lo puse, Samantha me paso un
delantal, era del tipo que usaban las criadas del siglo XIX, el vestido era
todo largo con el delantal de tirantes sobre los hombros y correas de la
cintura atadas con un gran lazo en la parte trasera de mi cintura, me lo ato y
me enseño como debía hacerlo yo en las próximas veces.
Luego saco una gorra de sirvienta de la misma
época, blanca con largas cintas atadas bajo mi barbilla y otras cintas que
colgaban por la espalda, luego me puso unos zapatos negros lisos, con correas
en los tobillos, tanto él como ella se destornillaron de risa ante la patética
figura que tenían delante, humillado y vestido con una criada del siglo XIX.
Él dijo, “Estarás vestido de esa manera todos los días
de tu vida, te levantaras a las cinco en punto todas las mañanas para encender
el fuego de cada habitación cuando sea necesario, preparas el desayuno y lo servirás,
limpiaras todas las habitaciones hasta que queden impecables, vas a pasar horas
lavando la ropa a mano, luego la tenderas en el secadero, para posteriormente
plancharla perfectamente, harás una reverencia a cada persona que conozcas”
frunciendo el ceño, continuo, “Cuando esperes ordenes, te mantendrás de pie
recatadamente con las manos entrelazadas frente a ti e inclinaras la cabeza”
Samantha agrego, “Si no eres necesario te retiraras
a tu habitación donde te pondrás tu camisón, luego te presentaras ante nosotros
para saber que estas listo para irte a la cama, después de lo cual serás
encerrado en ella y con la luz apagada”.
¡Ella se rio!, “No es exactamente el futuro que tenías
planeado, Susi, ¿Verdad? Pensaste en pasar una vida de lujo, en cambio pasara
una vida de servidumbre” Samantha pensó.. había odiado durante años esa vida de
sirvienta, había vivido con su madre en la casa de la tía de su marido donde su
madre servía como sirvienta, y la habían tratado con total desprecio a las dos,
a pesar de su pobreza obtuvo una buena educación, se doctoro y se unió al
equipo del medio Thomas Edwards,
Ella se había convertido en una hermosa mujer,
heredando la herencia de su madre, ella y Thomas se habían convertido en
amantes y había vivido con el durante dos años, entonces su madre le había
informado él había heredado una fortuna por parte de tu tía, después de años de
servidumbre a su servicio la madre de Samantha no había recibido nada e incluso
la habían despedido, furiosa por el trato de que le habían dado a su madre,
había planeado venganza contra el heredero desde ese momento, la idea de que continuar
disfrutando de una vida de lujo era mas de lo que cualquiera de las dos mujeres
podía soportar, fue su madre quien tuvo la idea “Me encantara ver al arrogante
bastardo de su sobrino reducido a la posición de sirvienta bajo mis órdenes”.
Samantha había aprovechado la idea diciendo, “Si
madre que maravilloso castigo”, su madre se había reído, diciendo “Si
especialmente si pudiéramos tener todo su dinero”, a lo que su hermosa hija
añadió, “Hay una manera, casándome con el sobrino”.
Samantha entonces había coqueteado deliberadamente
con él en una función social, él halagado por las atenciones de una sorprendentemente
bella mujer, había caído directamente en sus manos, a los seis meses se habían
casado, él no se había dado cuenta como la chica desgarbada que había vivido en
el sótano era la hija de la doncella de su tía.
Mirando al sissy, vestido con el uniforme de
sirvienta pensó, “Yo he tenido que sufrir que estuvieras acostado en mi cada,
con esa mierda de polla”, pero mientras continuaba mirándolo se delito en un
sentido puro de placer sádico, ella y su madre lo harían sufrir por el resto de
su vida, ella fue sacada de sus pensamientos cuando escucho al sr. Edwards
decir, “Párate en la esquina asume tu posición” Yo obedecí instantáneamente con
las manso entrelazadas en el delantal, con la cabeza gacha, viendo como él se desnudaba,
revelando su enorme cuerpo musculoso.
Samantha riéndose se quito el vestido y se paro
frente a él, vestida solo con un sujetador de encaje blanco, bragas blancas y
un liguero tenso por sus muslos bronceados, llevaba tacones de aguja de cuatro
pulgadas de alto de color blanco, con una sonrisa burlona hacia mí, coloco su
mano en la polla del sr. Edwards y comenzó a acariciarlo.
Dejo escapar un gemido cuando su enorme polla se
puso erecta, creció mas de diez pulgadas, ella dijo “Mira Susi, una polla de
verdad no como la tuya”, mientras se reía viendo como yo lloraba en el rincón,
empujo al Sr. Edwards sobre la cama y todavía acariciando su polla palpitante
se inclinó sobre él dándome la espalda, deliberadamente permitió que la viera bragas
blancas estiradas tensamente sobre su culo bronceado, su liguero se tensaba por
los muslos.
Allí estaba yo sollozando mientras mi tormento
deliberadamente me atormentaba, el pensamiento de estar allí humillado mirando
el hermoso cuerpo vestido solo con la ropa interior sexy, mientras acariciaba
la enorme polla de ese hombre me atormentaba.
No podía apartar la vista de las bragas de Samantha,
las piernas bien formadas revestidas con medias de nailon acentuadas por sus
zapatos de tacón, luego ella tiro de su tanga hacia un lado para mostrarme su
coño mojado, soltó un grito mientras montaba la enorme polla hinchada del sr. Edwards,
se recostó en la cama, cerré los ojos mientras ella cabalgaba arriba y abajo,
mas y mas rápido, mi pequeña polla intentaba erigirse dentro de esa vagina
falsa, empecé a sentir como el pre semen goteaba en mis nuevas bragas rosas.
Mientras mi esposa montaba la enorme polla, su coño
goteaba, me miro para ver mejor mi humillación, ella saba que mi polla se
estaba poniendo dura dentro de esa vagina falsas, echo su cabeza hacia atrás y
se rio, lo sabía estaba funcionando tal como ella lo había diseñado permitiendo
una erección, permitiendo que su pre semen, pero nunca permitiendo la
liberación de la polla, una vida de servidumbre y frustración total dentro de
sus bragas, ella se rio mientras me miraba sollozando de pie en una posición
recatada, humillado y frustrado, completamente feminizado, de golpe la polla de
sr Edwards estallo dentro de ella, chorros de esperma caliente llenaron su
coño, ella grito mientras el semen se derramaba sobre su enorme polla, yo
lloraba incontrolablemente al escuchar los gritos de lujuria, sabiendo que el
alivio sexual me había sido negado para siempre.
Samantha yacía sobre su amante total y
completamente satisfecha, nunca había tenido un orgasmo así, me miro para ver
la humillación que estaba pasando, también para ver mi completa frustración sabiendo
que mi pequeña polla era incapaz de tener una erección dentro de esa falsa
vagina.
Samantha se rio al sentir que la polla de su amante
se ablandaba por dentro, se levanto permitiendo que él viera el capullo ahora
flácido de su amo, sentándose a un lado de la cama con ella con las piernas
vestidas con medias muy separadas, abrió los labios de su coño para que yo
pudiera ver como su coño estaba húmedo lleno de esperma.
Mientras ella y el Amo reían a carcajas delante de
mí, la puerta se abrió y en la habitación entro la madre de Samantha, ¡ella me
miro y grito un “!Si!” de deleite puro, yo la reconocí de inmediato, era la ex
doncella de mi tía, la humillación aumento cuando dijo, “Si, sissy, soy yo, la
sirvienta que tanto trataste con desprecio y ahora soy tu nueva ama.
“salúdame como es debido patético sissy” ella me
abofeteo duramente en el rostro, “Aprenderás a humillarte a mis pies” Samantha
y el amo se rieron, mientras yo hacia una reverencia frente a la madre de ella,
la señora Judy que era así como se llamaba dijo, “Arrástrate hasta aquí, sissy,
y besa mis pies”.
En la habitación sonaron carcajadas cuando me
arrastre hacia la señora Judy y bese sus zapatos de tacón, Samantha y el señor Edwards
se vestían mientras yo continuaba besando a los pies de la madre de Samantha
“¿No es hora de que esta criada esta en la cama?” pregunto Judy.
“Si mami, estoy segura de que es muy tarde”, respondió
mirándome mientras seguía besando los pies, “Vamos pote tu camisón rosa ahora”,
me desnude y me pare desnudo frente a ellos, Judy rugió de risa mientras miraba
esas enormes tetas colgando y mi falsa vagina, señalando la vagina pregunto,
“¿Esta tu polla dura ahí dentro, Susi?”
Llore mientras confesaba, “Si, señora, no puedo
correrme, por favor ayúdeme, señora haga que Samantha me lo quite por favor”.
Judy me puso la mano en la vagina y me pregunto,
“¿Te refieres a que este fuera de aquí?”, ella podía sentir mi pre-semen
filtrándose en su mano, volviéndose hacia Samantha dijo, “En el futuro esta
chica deberá usar unas compresas”.
Samantha colocando su mano sobre la vagina, se rio
cuando sintió el líquido, “Si estoy de acuerdo contigo mami, mañana iremos ha
comprar no puedo permitir que camine con las bragas constantemente mojadas”.
Judy me arrojo el camisón rosa, “Prepárate para
irte a la cama, Sissy” me puse el camisón, “Ahora metete en la cama donde
tienes que estar”, dijo Juedy, luego cogió un bastón largo y delgado, “Levanta
el camisón, he esperado años para hacer esto…” me levante el camisón y deje al
descubierto mi culo rayado y azotado, grite cuando Judy me puso el bastón en el
trasero, “Si, esto se siente maravilloso”, grito mientras daba golpes con el bastón
una y otra vez en mi culo.
Finalmente, ella se detuvo, años de ser tratada con
desprecio por mí, le había dado fuerza para pegarme con el bastón, sonreía con
satisfacción, al mismo tiempo tenia las bragas empapadas de excitación, dijo,
“Ahora ya puedes irte a la cama, bastardo, tendrás años de esto por delante”.
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