sábado, 25 de julio de 2020

Mi nombre


Mi nombre es "Yvette" o, al menos lo es cuando estoy feminizado. He estado llevando cosas de chicas desde que tenía cuatro o cinco años lo crea o no. La primera vez robe unas bragas de una amiga que tenía en un cajón y las guarde, las solía llevar a menudo, mi madre siempre me las lavaba y las volvía a poner el cajón, nunca me dijo ni una sola palabra. Eran sencillas de algodón blanco pero indiscutiblemente eran bragas y no unos calzoncillos. Así que, no se por las lavaba y las guardaba como si fuera ropa interior masculina, así que seguí usándolas. Nunca me dijeron nada ni bueno ni malo pero no sé porque me gustaba llevarlas. Tal vez ella vio algo que yo no vi hasta más tarde en mi vida. Una día en la escuela vi a un niño que tiro de los calzoncillos a otro niño y cuando llegue a casa mi di cuenta de que si me lo hubiera hecho a mí, se hubiera descubierto que llevaba bragas habría sido horrible.
Siempre fui un niño pequeño afeminado delgado y con miedo a que alguien lo descubriera, así que finalmente las tire por miedo.
Toda mi vida he crecido robando bragas, de los cajones de amigas, de los cuartos de baño, de la ropa tendida, incluso de tiendas. Recuerdo haber robado unas de raso amarillo en una tienda locas que tenia volantes de encaje en el trasero. Dios! como me gustaban, eran especiales en la forma en que me podía sentir el encaje con volantes a través de mi ropa cuando me frotaba el trasero. De vez en cuando me atrevía a usar las de mis hermanas mayores y sorprendentemente nunca fui atrapado.
Cuando me hice mas mayor y más valiente empecé incluso a usar de nuevo en clase, en ocasiones, incluso en las clases de gimnasia. Recuerdo una vez en el séptimo u octavo grado de ver a unas muchachas que miraban a escondidas a través de su escritorio mis vaqueros y pensé "Me pregunto si alguien ha visto el borde superior de mi ropa interior" Sorprendentemente ya no me asustaba, si no lo contrario me encendía, pensar que alguien en secreto sabía que yo estaba usando bragas. No es que hacia alarde de ello, siempre tenía cuidado de meter la camisa o la camiseta sobre ellas.... pero.... me preguntaba.
Siempre me había masturbado antes de la pubertad y tenia fantasías sexuales de chico y chica. De hecho, la primera relación sexual que tuve yo tenía ocho años o así, y lo hice con otra chico. Solíamos jugar a lo que llamábamos "M & S" (Mete y saca) y  situábamos la polla entre las nalgas sin entrar, ya con 18 años nos empecé a pensar en sexo oral y quería follar culos o que me follaran.
Más adelante conocía a una chica que vivía en la misma calla (Era un poco mayor que yo) Ella básicamente estaba sola en casa todo el día, excepto que algunas veces debía cuidar de un hermano menor que tenia, su hermano era pequeño y molesto. Solíamos tontear un poco, aunque un día mezclamos el alcohol con nuestras hormonas, me llevo a su habitación, cerró la puerta y me cogió. Yo estaba nervioso, pero ello lo hizo todo. Más tarde me entere de que lo me había hecho lo había visto hacer a su madre y a su amante (su padre era un conductor de camión y nunca estaba allí). Teníamos sexo juntos pero ella no quería que le follara su coño, en realidad lo que hacía era follarla por detrás, a ella le gustaba porque lo había visto con su madre.
El estaba importantemente homofogo y aunque nunca me toco, y decía que la gente como rara debía estar muerta así que nunca le dije nada sobre mí, el vecino me hizo pensar que también era un bicho raro. Ella se fue un mes o dos después de todo lo que había empezado. Así que yo estaba empezando a descubrir la sexualidad y no sabía a dónde ir.
Me puso como loco y empecé a llamar a teléfonos que vi en un baño de la biblioteca local. Llame desde un teléfono publico y el chico me dijo que le gustaba chuparle la polla a otros chicos. Yo hable varias veces antes de quedar con él. Me dijo que estaba casado con una azafata y que raramente estaba en casa y le era indiferente hacerle a un chico como una chica. No recuerdo cómo llegamos sobre el tema, pero admití que me gustaba usar ropa interior femenina.
Me pidió el tamaña de la ropa que llevaba y me dijo que su esposa probablemente me iría bien y si quería podía ir a su casa para probarme algunas prendas. Finalmente decidí ir cuando me dijo que su esposa se había ido varios días. En realidad vivía relativamente cerca de mí y cuando llegue a su casa era amable y nada agresivo, probablemente tenía alrededor de unos treinta (Me había dicho por teléfono que tenia veinticuatro, pero su voz ya parecía mas mayor), saco algunas revistas crossdresser que me parecieron increíblemente sexys y me hicieron sentir que no estaba solo, en todos mis gustos. Él me dijo mirarlas y luego me llevo a su dormitorio, donde me dejo mirar las cosas de su esposa, bragas, sujetadores, vestidos, zapatos, maquillaje y él quería que me pusiera algo porque me quería en su cama.
Pronto lleve su maquillaje, medias, zapatos, y me vestí con todo tipo de la ropa de su mujer. Incluso saco una peluca para que me pusiera. Luego cogió una cámara y empezó a hacerme fotos con todo tipo de ropa puesta, me decía que no dejaría que mi rostro saliera en ellas, pero yo sabía que no lo haría. De todos modos estaba tan enfrascado en esa oportunidad de ponerme ropa femenina y me encendida tanto, sintiéndome femenina y sumisa con él, que hubiera hecho cualquier cosa que él me hubiera dicho.
A día de hoy me pregunto donde estarán esas fotos. Me encantaría tenerlas en mis manos, sería tan erótico. Entonces él se sentó en el borde de la cama y me dijo que le sacara su polla y la frotara. Mientras lo estaba haciendo cogió mi cabeza y la empujo hacia abajo para que le chupara la polla. Yo no lo había hecho nunca así que pensé como hacerlo y pensé que me estaba comiendo un plátano o un lamiendo una piruleta, así que lo hice sin nauseas. Entonces él se acostó en la cama, me puse a su lado y empezó a tocar mi polla a través de las bragas, nunca había tenido antes aquella maravillosa sensación.
Creo que él lo savia porque se detuvo antes de que me corriera y me dio la vuelta. Luego se levanto se acerco a mi trasero y tiro de las bragas hacia abajo, empujo mi cara en la almohada. Metió la mano bajo mis pelotas y saco la parte delantera de las bragas por encima de mi polla que estaba totalmente dura y la cogió y la tiro hacia atrás quedaba mirando hacia mi culo, eso me encanto!
Anhelaba esa sensación de estar a punto de ser follado, sentir como las bragas caían y que mi culo sería usado. El siguiente paso fue lubricar mi trasero con una enorme cantidad de lubricante. Uso gran parte de él y estaba en todas partes. Él debía haber sido un infierno tener que limpiar todo ese desorden después.
Estoy seguro de que mi culo virgen estaba tan resbaladizo que era posible, pero no sabía si una polla dura podría entrar, no estaba acostumbrado a ella. En este punto de quise quitarme las bragas totalmente pero él me dijo que no me las quitara si no que las mantuviera allí.
Casi me corro cuando deslizo su dedo lubricado dentro de mí y cuando deslizo su polla dentro de mí al estilo perrito tuve que detenerlo frotando mi polla mas dentro de las bragas porque estaba a punto de acabar. Cuando se corrió dentro de mi pude sentir su semen caliente y húmedo llenando mi trasero (el más cercano a este he tenido desde que es la sensación de un enema caliente, si alguna vez has tenido alguno esas es la sensación al entrar el semen en tu trasero. Si tocarme la polla yo también explote, eso fue la única vez que me ha pasado. Me corrí en las bragas de su mujer, y después los dos nos quedamos allí acurrucados durante unos cinco minutos. Estuve con él dos veces más antes de que él, miedo, la culpa, la juventud, lo que fuese que hizo que lo dejara de ver y nunca llegue a correrme de ese modo de nuevo, aunque varios chicos que he estado me han llenado el trasero de semen, (También vestido en forma femenina) ya que he aprendido que mi producción de semen es minúscula el orgasmo no mucho mas de una cucharada más o menos.
Si yo lo hubiera conocido mas seguramente habría dejado que me follara más veces. La última vez que estuvimos juntos se corrió en mi boca llenándola totalmente, valió la pena, era como una maquina no paraba de chorrear me lleno totalmente la cara y podía sentir como me llenaba. De hecho, cuando caminaba a casa después de la primera vez me sentí como si estuviera sosteniendo un enema, y cuando por fin llegue a casa mis bragas estaban empapadas que habían calado mis tejanos, (él me dijo que me podía llevar las bragas, eran de color amarillas con volantes)
Por suerte mis pares no estaban en casa cuando llegue así que me pude dar un buen baño y entonces me di cuenta que también tenía los tejanos manchados. No podía creer que toda esa leche se hubiera filtrado fuera de mi culo (en contra mía). Como era todavía me empuje una enorme cantidad de mi cuando me senté en el inodoro! De hecho, incluso después me lleve con un paño húmedo para después, y me puse una larga camisa para ocultar la próxima vez que fui allí, pero ya no lo necesitaba porque cuando le dije lo que había traído, el se rio y se le ocurrió una mejor idea que era ponerme un tampón de su esposa inmediatamente después de correrse dentro de mí. Cuando destape mi trasero más tarde, que me costó un tiempo sacarlo, ya que se había hinchado dentro de mí, todo el semen que había salió como un chorro de agua.
A medida que fui creciendo me entonces y salí solamente con mujeres durante mucho tiempo. Ahora estoy perdido por un terreno resbaladizo y anhelo aquellos tiempo con mucha melancolía.

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