viernes, 24 de marzo de 2023

Las nuevas tecnologías y el estado

 

Esta historia está ambientada en un futuro en algún país del globo pero sin embargo esto podría ocurrir en cualquier lugar con los nuevos cambios en la tecnología y los gobiernos.

 

En un futuro la cámaras estarán en todas partes, con las nuevas tecnologías de grabación y las cámaras HD se puede ver a una persona con la que se está hablando, incluso algunos de nuestros coches llevan cámaras incorporadas, el internet inalámbrico cada vez está en mas lugares, en todas partes hay o bien un ordenador, un teléfono o una tablet, hay micrófonos y cámaras adjuntados a esos dispositivos

 

Pero esta tecnología puede funcionar de dos maneras, no solo nos permite ver el interior de nuestra casa cuando estamos lejos, sino que también permite que nos puedan espiar, dado que cada casa ahora está siempre conectada a Internet, gente fuera de nuestro control puede escuchar y observar que hacemos, además, las fuerzas gubernamentales también puede recibir mucho poder, así que lentamente el estado comenzó a mirar y escuchar cada uno de nuestros movimientos.

 

En un momento dado hubo un cambio drástico en el poder, paso de ser un club de hombres a donde cada vez más las mujeres recibían cargos mas y mas importantes dentro de los pequeños ayuntamientos hasta recibir el mando del estado, acabando al final siendo gobernado solo por mujeres en su totalidad.

 

Este hecho ha cambiado la forma en tratar a otros países, y la ética en el gobierno mundial, ahora por fin, estamos cuidando la naturaleza y la madre tierra, además de los derechos humanos que se han convertido en un problema mundial, debido al cambio en el poder hacia las mujeres ya no se toleran que los hombres repriman sus vidas, una mujer ahora puede presentar una queja sobre un hombre y con todas las cámaras y micrófonos que hay en los hogares y puestos de trabajo, la policía puede determinar fácilmente si la mujer tiene un caso solido contra un hombre por acoso u otra ofensa, además, dado que los hombres otorgaron tanto poder al presidente y a la policía, toda esta vigilancia es legal y fácil de realizar.

 

Debido a la gran cantidad de quejas contra los hombres y los cargos resultantes que se presentaron, se tuvo que establecer un nuevo sistema, la mayoría de los hombres se declararon culpables una vez que se les mostraron los videos de sus transgresiones, las mujeres que gobernaban iniciaron la construcción de nuevos centro penitenciarios solo para hombres, el procedimiento seguía de esta manera, al principio, una mujer o muchas mujeres presentaban una queja sobre un hombre, la policía interceptaba el audio y el video de donde trabajaba el hombre, su casa, o incluso su coche, unos controladores compuestos por tres hombres y tres mujeres revisaban el video, si encontraban suficientes pruebas contra ese hombre, entonces recibía una carta para informar a un centro correccional, este centro había sido creado solo para manejar los crímenes contra mujeres, al principio solo habían hombres que había acosado sexualmente alguna mujer en sus diversas formas.

 

Un día cuando llegue del trabajo a casa, había una carta electrónica que apareció en mi pantalla de ordenador, en lugar de informar en mi trabajo a la mañana siguiente tenía que ir a un centro especifico por la mañana, yo era soltero y no podía entender como una mujer podía haber presentado una queja en mi contra, pensé que probablemente era un error y que se borraría cuando informara al correccional.

 

Cuando llegue a las instalaciones a la mañana siguiente, era un edificio de aspecto muy agradable informe al mostrador de información, el empleado busco mi nombre y me envió a una sala de espera de un tercer piso, me dieron un archivo de papeles que debía entregar a la recepcionista del tercer piso, cogí el ascensor hasta allí, dentro de él había una música relajante y magníficos posters de naturaleza, las mujeres que estaba en el poder realmente había cambiado nuestra tierra y el medio ambiente.

 

Cuando salí del ascensor, parecía la recepción de una consulta médica, o incluso de un dentista, había muchas sillas y mesas con tablets para que pudieras leer varios artículos de prensa, pasa salvar los arboles, ahora todos usábamos tablets electrónicas para leer periódicos, revistas y todo lo relacionado con la anterior prensa, también podíamos acceder a nuestro correo electrónico personal mientras esperabas, las tablets llevaban incorporada una cámara, un teclado, micrófono y articulares para que pudieras escuchar tus propios mensajes o videos sin molestar a los demás.

 

Me sorprendió que todos estaban ya sentados, al recepcionista llevaba puesto un uniforme blanco, la mire y le entregue mis papeles, mi hizo firmar unos cuantos papeles más y luego me dijo que me sentara a esperar mi turno, mientras esperaba venia de vez en cuando mujeres con uniformes de enfermeras que venían a buscar a los demás hombres los cuales desaparecían en los pasillos del centro, después de unos diez minutos me llamaron.

 

Una chica me acompaño por el pasillo mientras me hablaba, "Mi nombre es Jane soy la que te acompañare a través de diversos eventos que aras hoy, tu primera parada será en la sala de evaluación, donde veras y escucharas los cargos que hay en tu contra, dependiendo de lo que suceda allí, se determinara los que pasara el resto del día", Jane abrió una puerta de una habitación con donde había una gran pantalla de video y unos asientos para unas seis personas, Jane me mostro la silla donde iba a sentarme y salió de la habitación, unos minutos más tarde, tres hombres y tres mujeres entraron en la habitación.

 

Dentro había una mujer que permaneció de pie mientras otras personas que entraban por otra puerta se sentaban en los asientos, "Tu nombre es Clyde W. Passt, ¿Es correcto?", pregunto.

 

"Si, lo es.. pero yo no he hecho nada malo.." me queje.

 

"Ya lo veremos después de ver el video, en el último mes, tres mujeres diferentes se han quejado de cómo las has tratado, después de observar horas de vigilancia tus acciones hacia esas mujeres, estamos de acuerdo con sus quejas, hemos reducido el video a cinco minutos mostrando tus erróneas acciones, por favor, mira el video en silencio".

 

Para mi sorpresa, me enseñaron unos videos con audio donde yo decía que alguna mujeres era unas zorras bien a su cara o bien por detrás de la espalda, también me enseñaron como miraba pornografía y varias otras actividades en las que humillaban a mujeres, otros comentarios que había dijo de que las mujeres nunca deberían estar al mando". Esos comentarios me sorprendieron, al igual que la calidad del audio y video, cada pequeño comentario que había dicho era perfectamente grabado, era imposible decir que eso no era mío, has que no tenía más opciones que declararme culpable.

 

El video termino y la mujer se levanto de nuevo, "¿Estas de acuerdo en que has sido irrespetuoso con las mujeres y las has acosado?".

 

"Si, lo he visto, lo siento y nunca volverá a pasar", dije.

 

"Para asegurarme de que no lo volverá a hacer, recibirá un castigo por sus acciones, vendrá en forma de varios azotes, si responde bien a sus castigos, se le permitirá volver a casa, de lo contrario, le mantendremos aquí para futuros castigos, ¿Comprende el acusado?".

 

"¿Azotes?", grite, "Deben estar bromeando!, no me pueden azotar".

 

"Por favor, siéntese y permanezca en silencio, o de lo contrario su castigo será más severo, ahora saldrá de la sala y Jane lo acompañara a su próximo paso en este proceso", ellos salieron y me dejaron preguntándome que me pasaría a continuación, no podía salir de la habitación ya que la puerta estaba cerrada con llave, así que me senté pensando en lo que vendría a continuación.

 

Se abrió la puerta y entro Jane diciendo, "Clyde, por favor sígueme a la sala de preparación, responderé a todas tus preguntas una vez que estés dentro de la sala".

 

Me guio por varios pasillos, pensé que era un edificio extraño porque no se veían ventanas y las pocas puertas que veía tenían alarmas de salida, parecía que no había mas remedio que seguirla, después de muchos más pasillos se detuvo en una puerta donde ponía un numero "311" abrió la puerta y pude ver unos diez armarios y dos bancos de madera, me recordaba a un pequeño vestuario de un gimnasio.

 

Ella busco en un armario y saco lo que parecía una bata de hospital, "Por favor quítate toda la ropa, incluidos los zapatos y calcetines, colócalos en el casillero número dos, luego ponte esto con lo que se abre por la parte de atrás, esperare afuera hasta que te hayas cambiado de ropa, cuando hayas cambiado la bata, llama a la puerta, entrare y pondré un candado en el casillero, para que nadie toque tus pertenencias, también responderé a cualquiera de tus preguntas, se rápido", luego salió de la habitación.

 

Me alegre de que mi ropa estuviera cerrada con llave porque llevaba todos mis papeles de identificación y mi cartera, la bata era muy delgada, apenas pasaba mis rodillas, también había dos cintas que la mantenían cerrada, una estaba en la parte superior para el cuello y la otra estaba a mitad de la espalda, una vez que me lo puse, me sentí muy vulnerable, pero toque la puerta y Jane volvió a entrar, ella abrió el casillero, saco unos calcetines raros y me los dio, tenían una sustancia dura en un lado.

 

"Esto te servirá de zapatillas mientras estés en la instalación, póntelas y luego levántate y dame la espalda, así puedo asegúrame de que te hayas quitado la ropa, luego cerrare el casillero y responderé a todo lo que me digas, así que levántate y pon tus manos sobre la cabeza", me dijo.

 

Me puse de pie, puse las manos en la cabeza, ella a continuación, sentí sus manos subiendo por mi cuerpo, "¿Qué haces?" le pregunte.

 

"Solo me estoy asegurando de que no lleves nada de ropa, quédate quieto si no tendremos que aumentar tu castigo", me dijo.

 

Jane tenía más o menos mi edad, y me excitaba sexualmente tener sus manos recorriendo todo mi cuerpo, incluso paso sus manos por el interior de mis piernas hasta que llego a mis partes más privadas, me alegre de estar a espaldas de ellas, porque si no hubiera visto mi gran tienda de campaña, "Puedes sentarte y responderá tus preguntas, no te preocupes por tu reacción de mi manos, la mayoría de los hombres tiene la misma reacción".

 

Me senté rápidamente junto a Jane e intente esconder mi erección con mis manos, "Explícame esto del castigo, ¿Estarás conmigo mientras lo recibo?"

 

"Dado que esta es tu primera vez en estas instalaciones de corrección, tus azotes serán relativamente suaves, pero te acusaran una gran impresión", dijo Jane, "Comenzaran con unos azotes de treinta minutos usando varias paletas e implementos de azotes, luego, después del almuerzo, se te darán seis golpes de bastón, si hablas cuando no se te ha pedio, o si no sigues ningunas de nuestras ordenes, tus azotes serán más severos y duraran mas, te acompañare de una habitación a otra, pero no estaré en las habitaciones durante el castigo, ¿Alguna otra pregunta?".

 

"Pero no me han azotado desde que era un niño, ¿es realmente necesario?". Pregunte.

 

"Las mujeres han probado este método de castigo y han encontrado que es muy eficaz a la hora de cambiar el comportamiento de un hombre, todos los castigos serán otorgados por mujeres en el trasero desnudo del hombre, y es mejor que sigas cada orden sin vacilar o protestar, puedes hablar conmigo ahora, pero debes permanecer en silencio a menos que se te pregunte, ¿Alguna pregunta más o comentario?", pregunto Jane.

 

"No, supongo que debería aceptar mi castigo y terminar con esta terrible experiencia", le dije.

 

"Ya que no te han azotado desde que era un niño, te sugiero que recibas un azote de mi parte ahora mismo, hará que tus azotes sean mas fáciles de llevar ya que tu parte inferior ya estará calentada", dijo, Jane, "Esta será de tu elección y no cambiara tu castigo si la aceptas, también te llevara a adoptar un papel más sumiso por el resto del castigo".

 

"¿Realmente ayuda?", le pregunte.

 

"Si, te ayudara a soportar los otros azotes, pero es tu elección".

 

"¿Durara mucho?", pregunte.

 

"Depende de lo rápido que tu culo se ponga de color rosa, pero debería durar menos de cinco minutos, como te dije, solo calentare tu trasero para tus siguientes azotes".

 

"Entonces supongo que te permitiré que me los des, ¿Cómo quieres que me ponga?".

 

"Levántate y quédate a mi lado", Luego ella se supo hacia el centro del banco, "Por favor recuéstate sobre mi regazo con todo tu peso que quede apoyado en el banco", subió su vestido, separo las piernas, cuando me recosté en su regazo, mi pene quedo entre sus piernas, luego me sentí totalmente atrapado cuando sus muslos se cerraron alrededor de él y sentí sus manos como abrían la parte de atrás de la bata, "Separa las piernas por favor, por cada pierna a cada lado del banco", ahora estaba totalmente expuesto a una mujer que acaba de conocer.

 

Entonces comenzó a azotarme, primero con azotes suaves que luego se hicieron cada vez más fuertes, tampoco dejo parte de mi pobre culo desnudo sin tocar, acariciaba mi trasero de vez en cuando, sentía placer y dolor a la vez, pero pronto los azotes empezaron a doler mas y mas, comenzó a menearme, "Quédate quiero o de lo contrario duraran mas" así que trate de quedarme quieto mientras ella terminaba, mi pobre culo lo sentía mas y mas caliente.

 

Dejo de azotarme y dijo, "Lo has hecho bien, tu culo finalmente tiene algo de color, ahora levántate y quédate de espalda para que pueda prepararte para la siguiente fase de tu castigo".

 

Metió la mano en un armario y saco algunas cosas, "Ahora pon tus manos detrás de tu espalda", entonces sentí que me ponía unas esposas, luego puso algo en mi bata que la separaba, de modo que mi culo quedara totalmente expuesto, también coloco un pulsera de plástico que me identificaba, "Todo hombre que esta punto de ser castigado pasa por estas mismas medidas de seguridad, cállate y sígueme a un habitación para tu primera sesión de azotes.

 

Caminamos por mas pasillos, note que otros hombre llevaban batas como la mía y las manos atadas detrás de la espalda, con sus culos rosados expuesto, finalmente, nos detuvimos en una puerta donde había el numero 102 escrito, ella presiono un botón de un intercomunicador.

 

"Tengo a Clyde listo para sus azotes, ¿entramos?", pregunto Jane.

 

"Si, entrad que tengo todo listo para él", dijo una voz de dentro

 

"La que te va dar los azotes es Nancy, es muy buena azotando a los hombres, pero asegúrate de seguir cuidadosamente cada una de sus ordenes, regresare en unos treinta minutos para acompañarte al almuerzo" luego ella abrió la puerta y se fue.

 

Delante de mi había un mujer de unos seis pies de altura y muy bien formada, llevaba una falda muy corta y una blusa blanca, "Soy Nancy y te azotare durante unos treinta minutos, ¿Necesitas que te ate o me permitirás azotarte? dímelo, puedes hablar conmigo ahora".

 

"Me someteré a ti, no hace falta que me ates", le dije.

 

Ella se coloco a mi lado y finalmente pude ver todo el interior de la habitación, había varios implementos para azotar en la pared y había muebles de aspecto extraño en ella, también había un gran "X" de madera y otra en forma de "T" en la pared, también había espejos dispersos por la habitación y muchas piezas de metal.

 

Ella me acompaño a un extraño mueble, "Vamos a empezar en este banco de azotes, arrodíllate sobre él", me arrodille y luego mire en frente de mi, ella paso por delante y se inclino hacia abajo, me quito las esposas y me empujo hacia delante para que quedase totalmente inclinado, dejando el culo totalmente expuesto, "Extiende tus piernas para que tenga acceso completo a tu cuerpo", dijo ayudándome a abrirlas, ahora estaba totalmente expuesto, luego movió un espejo frente de mi y un reloj digital que mostraba una cuenta atrás de treinta minutos, "Puedo detener el reloj remotamente o agregar minutos a tu tiempo cuando quiera, así que por favor, mantén la posición y no trates de cubrirte o frotar tu culo con las manos, si te mueves, tendré que atarte al banco de azotes".

 

Se situó detrás de mí y abrió la bata aun mas, entonces sentí sus manos en mi trasero expuesto, "Jane debe haberte dado unos azotes con la mano porque tienes el culo rosado, realmente ella disfruta azotando a los hombres a quien escolta hacia sus castigos, te ayudara a soportar mis azotes" ella fue a buscar una pequeña paleta que colgaba en la pared, se acerco a mí y me la mostro, "Esta pequeña paleta debería funcionar a la perfección ¿Estas listo?".

 

"No tengo muchas opciones, así que sigue adelante y comienza", le dije.

 

La mire por el espejo mientras se paraba detrás de mí y levantaba la paleta, el reloj comenzó su cuenta atrás y comenzaron los azotes, esa pequeña paleta hizo que mi trasero se moviera, pero no dolía mucho, cuando ella me azotaba en esa posición durante unos cinco minutos, pude mantener mi posición sin ningún problema, fue embarazoso para mi tener las piernas separadas, y de vez en cuando Nancy soltaba la paleta entre mis piernas.

 

El reloj se detuvo a las 25:00 y dijo ella, "Has aceptado los azotes muy bien, ahora de pondré en una posición diferente y buscare otras paletas más severas sobre ti, así que levántate y sígueme, no te frotes el culo y no hables", ella me llevo a una pared de la cual había dos cajas de madera poco profunda de unos tres pies de distancia de la pared, en la pared había dos manecillas cromadas, como las que se pueden ver en una ducha, estaba separadas aproximadamente de dos pies de distancia de una a otra, "Coloca tus pies en las cajas y luego inclínate hacia las cajas de la pared manteniendo los brazos rectos", hice lo que me había pedido, luego bajo las barras para que estuvieran cerca de la cintura, esto hizo que mi trasero quedara derecho y mi polla colgara entre mis piernas, ahora quédate quieto mientras te desabrocho la bata, Jane puede volver a abrochártelo una vez que haya completado los azotes, moví mis brazos para que pudiera quitarme la bata.

 

Ahora estaba completamente desnudo y totalmente expuesto para mis azotes, con mis piernas abiertas y separadas, expuesto cada centímetro de mi pobre trasero, los espejos que estaban frente a mi colocados para que pudiese ver lo que ella hacía, coloco un temporizador de cuenta regresiva en un estante cerca de mí y me mostro unos remos que iba a usar conmigo, esta vez era mucho más grandes y más anchos, también me mostro una fusta que dijo que también era muy efectiva entre mis piernas, el cronometro comenzó a contar hacia atrás y los azotes comenzaron de nuevo.

A veces las paletas realmente me picaban, eso hacía que intentase levantarme, luego ella pon la mano en mi espalda diciéndome, "Quédate quieto y deja que tu trasero asuma su paliza, de lo contrario, pondré más tiempo al reloj", así que apretaba los dientes y me quedaba inclinado, a pesar de lo mucho que las paletas picaban mi pobre culo, también ella juagaba con mis pelotas manteniéndome sexualmente emocionado, eso hacía que me sintiera caliente.

 

El cronometro se detuvo a los 15 minutos y dijo, "Como esta es la primera vez que estas en este centro, te daré un descanso de cinco minutos, puedes levantarte, y frotarte tu culo, estamos a la mitad del tu castigo, luego unos azotes con correas durante diez minutos", se acerco a la pared y me las entrego, tenían aproximadamente dos pulgadas de ancho por dos pies de largo y estaban hechas de cuero muy flexible, "Ahora te dejare decidir cómo quieres recibirlas, ya sea de pie contra la pared o acostado en un banco".

 

"¿Qué es lo mejor?", le pregunte

 

"Tus piernas están perdiendo fuerza, el banco es lo mas fácil, pero ambos duele los mismo, ¿Entonces, que será?".

 

Pensé por unos segundos y dije que el banco, quería conservar mi energía, ella saco una banco y lo puso en el centro de la habitación, también cogió dos almohadas y las puso, "Ahora acuéstate en el banco para que las almohadas queden debajo de tu trasero, eso lo mantendrá en pompa, pon los brazos y las piernas estiradas, ¿Quieres que te ate en esa posición?"

 

"Déjame intentarlo sin estar atado", le dije, luego ella puso el cronometro enfrente de mí y comenzó a azotarme cuando se puso en marcha, la correa dolía mas que las paletas, además por si no fuera poco ella lo alternaba con las manos, supongo que estaba moviendo demasiado por que el temporizador se detuvo cuando aún faltaban 7 minutos.

 

"Con la correa es difícil azotarte si te mueves, así que te atare las manos y los pies al banco para que te quedes en tu lugar", después de que ella me atara, no me podía mover en absoluto, el temporizador comenzó de nuevo y ella me azoto durante unos dos minutos hasta que se veía 5, me desato y me permitió que me frotara mi pobre culo dolorido

 

"La ultima parte de tu castigo será con esta paleta de madera con agujeros", ella la levanto y me la mostro, "Realmente duele y quiero que estés quieto en el banco en el que empezaste, asegúrate de separar las piernas y mantente inclinado hacia adelante".

 

Nancy puso el cronometro frente al banco cuando me incline hacia adelante y separe las piernas, en el espejo podía verla como iba de nuevo a la pared a buscar una fusta, dio unos golpecitos en el interior de mis muslos y dijo, "Separa un poco más las piernas", después de separarlas lo que más que podía, finalmente dejar de tocar los muslos, el cronometro comenzó a contar hacia atrás y ella comenzó a azotarme otra vez, la paleta de madera con agujeros realmente picaba, me mantuve en posición pero tenía lagrimas en los ojos por el dolor.

 

Solo había pasado 1 minuto del temporizador cuando grite, "Por favor, detente, por favor, duele mucho".

 

"Se supone de tiene que doler, esto debería recordarte que siempre debes tratar a las mujeres con respeto y dignidad, ya que he tenido que detener el temporizador, agregare un minuto más a tus azotes", el temporizado subió a dos minutos más.

 

Luego una voz sonó en el intercomunicador, "Ya has terminado con Clyde?", era Jane

 

"El castigo de Clyde se completara en dos minutos, puedes venir a buscarlo", grito Nancy, luego me dijo, "Mante la posición y no digas nada, tu castigo terminara pronto", el cronometro comenzó de nuevo también lo hicieron mis azotes, todavía tenia las lagrimas en los ojos, pero no dije nada, finalmente el temporizador llego a 0 y mis azotes se detuvieron.

 

Puedes quedarte en esa posición hasta que Jane venga a por ti, espero que esto te haya dado una lección, no digas nada y no te frotes el trasero", dijo Nancy

 

Tenía muchas ganas de frotarme mi culo, pero hice lo que me había dicho y mantuve la posición, pronto oí que la puerta se abría y Jane estaba a mi lado.

 

"Levántate lentamente para que pueda volver a ponerte la bata y luego te conseguiré algo de comer antes de que te caigas", me levante y ella ato la bata, "Mira, tu culo es de color rojo brillante! realmente debe doler".

 

"Mucho", le conteste

 

"Recuerda, no hables, y pon tus brazos detrás de ti", Me sujeto las muñecas y me puso bien la bata para que mi pobre culo estuviera totalmente expuesto, "Ahora sígueme para darte algo de comer".

 

Caminamos por muchos pasillos hacia una cafeteria, cuando llegamos allí había muchas mesas y las sillas llevaban almohadas, ya que mis manos estaban atadas detrás de mí, ella me desato y me trajo una bandeja con la comida y la bebida, cuando me hube sentado me dijo, "Regresare dentro de unos treinta minutos para la siguiente fase de tu castigo".

 

Era agradable sentarse en un almohada y poder comer tranquilo, enseguida otros hombres se sentaron a mi alrededor, probé unas vitaminas que he habían traído y no sabían muy bien, pero las tome de todos modos porque no había mucho para comer ni beber, en mi trabajo, estoy acostumbrado a hablar con la gente, así que, naturalmente, comencé a hablar sobre la comida, rápidamente una mujer con un uniforme blanco corrió hacia mí.

 

"Usted no debe hablar con los otros hombre, déjeme ver su pulsera, extendí mi brazo hacia ella, "Eres Clyde, informare a Jane sobre este incidente", luego ella dejo la mesa y seguí comiendo sin hablar.

 

Antes de que me diera cuenta, Jane está de pie a mi lado, "Levante, tenemos que llevar los platos al lavaplatos, luego tengo que tratar una cosa contigo", caminamos hasta donde estaban los platos sucios, luego ella me ato los brazos a la espalda, caminamos mas por unos pasillos y entramos en un vestuario".

 

"Te dije que no podías hablar a menos que te pidieran hacerlo, me han dicho que hablabas en la cafeteria, así que ahora tengo que castigarte", Jane se sentó en el centro del banco y dijo, "Date la vuelta para que pueda desatarte tus manos, y luego quiero que te pongas en mi regazo para un azote" cuando me di la vuelta, vi que tenía un cepillo de madera en la mano, "Venga que no tengo todo el día", dijo Jane.

 

Una vez mas estaba sobre su regazo para que me azotara, pero esta vez mi pobre trasero estaba dolorido y sensible, el cepillo me dolía mucho, después de unos cinco minutos, Jane dejo de azotarme y me dijo, "Levántate para que pueda atarte tus manos, para poder ir a la otra habitación, a Ann no le gusta que la hagan esperar" me ato las manos detrás de la espalda y volví a ajustar mi bata al igual que antes.

 

Salimos del vestuario y caminamos por varios pasillos, Jane finalmente se detuvo en una puerta donde ponía "Sala de castigo 165" toco el botón del intercomunicador, "Ann, Clyde está aquí para su próximo castigo".

 

La voz que venía por el altavoz dijo, "Ocho minutos tarde, traes a Clyde ocho minutos tarde…"

 

Cuando entramos, me sorprendió lo que paso después, "Jane has llegado ocho minutos tarde y no me lo has notificado, esto puede tener un impacto para toda la instalación", dijo Ann.

 

"Clyde ha hablado en la cafeteria, así que he tenido que darle unos azotes adicionales, esta ha sido la razón de la demora", respondió Jane.

 

"¿Cuánto tiempo llevas trabajando con nosotros aquí, Jane?"

 

"Dos años", contesto

 

"Entonces sabes que las reglas dicen que debes llamarme si vas a llegar tarde", dijo Ann, "SI no haces una llamada, cuando escoltas al que llevas a la sala de castigos, recibirás el castigo que el castigador considere apropiado, y el castigador soy yo y te has ganado dos golpes de bastón".

 

"¿No podemos discutir esto al final del día, y no frente a Clyde?"

 

"Estoy sacando una silla", dijo Ann, "Quiero que te acerques, te bajes las bragas, subas el vestido y te inclines sobre la silla, HALZO!!!"

 

Jane siguió en silencio las instrucciones de Ann y se inclino sobre la silla, su bonito trasero redondo ahora estaba en exhibición, deseaba que mis brazos no estuvieran atados detrás de mi espalda, enseguida note que me estaba excitando.

 

"Recibirás dos golpes de bastón", dijo Ann, "Por favor cuéntalos".

 

A continuación, Ann cogió un bastón que estaba en la pared, se coloco al lado de Jane, el bastón hizo un silbido, y luego dejo una larga línea roja sobre el trasero de Jane.

"Uno, gracias, señora", Dijo Jane

 

Ann midió el siguiente golpe, saco su brazo hacia atrás, sonó un silbido y un golpe, ahora tenía dos líneas rojas paralelas que cruzaban el culo de Jane.

 

"Dos, gracias señora", dijo Jane

 

"Ahora levántate y enderézate, puedes venir a recoger a Clyde en veinte minutos, no llegues tarde o de lo contrario recibirás dos golpes más de bastón", dijo Ann, Jane se levanto rápidamente, se arreglo la ropa y salió de la habitación.

 

Ann era una mujer no muy alta, pero era voluminosa, su voz era baja para un mujer, definiendo, era un mujer sin tonterías, ella se miro los papeles y dijo "Clyde, recibirás seis golpes de bastón por mi parte, los contaras como ha hecho Jane, pero te atare al banco, ella me cogió del codo y me llevo a un extraño mueble, parecía una silla baja sin asientos, los brazos eran anchos y separados aproximadamente tres pies de distancia, la parte posterior de la silla tenía una picota que aseguraba el cuello y las muñecas.

 

Primero Ann desato mis manos y me quito la bata, "Arrodíllate sobre esto para que tus piernas se extienda y pon la cabeza y las muñecas en este orificio", una vez que mi cabeza y mis manos estuvieron en su lugar, ella baño la mitad suprior del cepo y lo cerro, ahora solo podía mirar hacia abajo y no podía ver lo que me estaba pasando, luego sentí que aseguraba mis piernas en el banco con correas, una vez más, estaba totalmente expuesto y no podía moverme.

 

"Asegúrate de contar esto y agradecérmelo, de lo contrario, recibirás el golpe de nuevo".

 

Sentí un golpeteo en mi culo, primero se oyó el silbido y luego sentí como cien abejas que me hubieran picado en una línea recta, Jane había tomado los dos golpes muy bien, no me había dado cuenta de que esto pudiese doler tanto, grite, "!Ay! duele!"

 

"Como no has cumplido mis órdenes y has olvidad contar, el siguiente golpe será el número uno", dijo Ann

 

Ella toco mi culo, volví a oír el silbido y sentí otra vez las cien picaduras de abeja, pero grite, "Uno, gracias mi señora".

 

"Muy bien aprendes rápido".

 

Sentí el golpecito, y otra vez el silbido, seguido del dolor punzante, "Dos, gracias señora".

 

"De ahora en adelante, trataras a las mujeres mejor", volví a sentir lo mismo, "Tres, gracias señora"

 

"Estas a mitad de tu castigo", otra vez lo mismo, "Cuatro, gracias señora".

 

"Solo quedan dos", otra vez lo mismo, pero ahora todo mi trasero estaba al rojo vivo, "Cinco, gracias señora".

 

"Solo queda uno, si vuelves a romper las reglas, recibirás doce golpes de bastón, así que se un buen chico".

 

Sentí el silbido y el dolor fue increíble, poco a poco mientras me recobraba le dije, "Seis, Gracias señora".

 

"Voy a quitarte las correas y la picota que te asegura en su lugar, pero te recomiendo que te quedes hasta que venga Jane y te coja", me sentí bien de poder moverme de nuevo, pero luego sentí las manos de Ann sobre mi pobre desnudo culo, "Tienes siete bonitas rallas en el culo, estas deberían recordarte que trates a las mujeres con dignidad".

 

La puerta se abrió y Jane entro con una camilla, era un poco extraña porque tenía un agujero de un tamaño mediano cerda de la mitad, Jane y Ann me ayudaron a salir de banco y me pusieron boca abajo en la camilla, me colocaron de modo que mi pene y mis pelotas entraran por el agujero de la camilla, debajo de la camilla había un tubo de plástico que capturaba cualquier liquido que saliera de mi pene, mis tobillos estaba muy separados y asegurados a la camilla, Jane me llevo por el pasillo a lo que parecía una pequeña sala de emergencias de un hospital, allí varias enfermeras revisaron mi pulso y presión arterial, escuche a una enfermera que se ponía unos guantes, lubricaba mi orificio inferior y metía un termómetro por el culo, examinaron el trasero para ver si estaba sangrando y le dijeron a Jane que todo estaba correcto y que me podía ir.

 

Luego Jane me llevo a algunas duchas y me desato de la camilla, "Ahora puedes bañarte o puedo llevarte de vuelta al vestuario".

 

"Me tomare una ducha", le dije.

 

"Tienes cinco minutos para hacerlo", contesto ella.

 

Me levante lentamente de la camilla y me duche, ahora no me molestaba que estuviera completamente desnudo, me sentó bien ducharme y sentir el agua fría en mi pobre trasero, notaba las siete rallas paralelas en mi trasero.

 

Enseguida llego Jane, me quite la toalla y me volví a poner la bata, Jane me ato las manos a la espalda y me acompaño al vestuario, me desato las muñecas y luego abrió la taquilla donde estaba mi ropa diciendo, "Si sigues las señales de salida, te guiaran a la zona de recepción, si necesitas volver aquí de nuevo tu castigo será más severo, así que se un buen chico".

 

Antes de que Jane saliera de la habitación, rápidamente dije, "Lamento mucho los azotes que has recibido por mi culpa, ¿Hay alguna forma de que pueda compensarte?".

 

Ella escribió algo en un pedazo de papel y me lo entrego, "Puedo darte un azote privado de mi parte, si lo quieres llámame", luego salió rápidamente de la habitación.

 

Me vestí, me sentía muy bien de salir de ese centro, deseaba tener un almohada para sentarme mientras conducía hacia mi casa, la día siguiente llame a Jane.

 

FIN

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